lunes, 7 de mayo de 2012

La Xunta asegura que el plaguicida para fumigar eucaliptos «no es tóxico»

El plaguicida que será utilizado en los próximos meses para fumigar zonas forestales de eucalipto afectadas por la plaga del gorgojo «no es tóxico», afirmó hoy en el Parlamento de Galicia el secretario general de Montes y Medio Rural de la Xunta, Tomás Fernández-Couto. El representante del Gobierno gallego indicó en comisión parlamentaria que la operación prevista entre agosto y diciembre próximos «no es una fumigación masiva» y que el producto utilizado no requiere «ningún tipo de autorización especial» porque es legal, dijo. Fernández-Couto respondió así a una pregunta del BNG sobre este tema, después de que una asociación denominada Plataforma contra las Fumigaciones denunciara recientemente ante los juzgados de la capital gallega la intención de utilizar flufenoxuron, un pesticida considerado altamente tóxico en una amplia zona alrededor de la comarca coruñesa de Melide. Autorización de la fumigación aérea mediante helicóptero El representante de la Xunta indicó que la Administración autonómica se ha limitado a autorizar la fumigación aérea mediante helicóptero, pero «ni ha financiando ni promovido el tratamiento», ya que precisó que está «financiada por empresas del sector» maderero. Reconoció que ningún producto químico es inocuo, pero subrayó que el que se aplicará en una zona de «unas 10.000 hectáreas» es un «insecticida fisiológico» contra las plagas y «no neurotóxico», utilizado comúnmente para el tratamiento de diversos tipos de plantaciones de verduras y frutas, que puede ser comprado en establecimientos especializados. El representante de la Xunta eludió, sin embargo, responder a las insistentes preguntas de la diputada del BNG Tereixa Paz sobre la prohibición de la Unión Europea de comercializar ese producto a partir de agosto y de distribuirlo desde el mes de diciembre. Fernández-Couto se limitó a indicar que hay un problema de «caducidad» y subrayó que es «el único producto químico para el tratamiento» de esa plaga que afecta al eucalipto gallego. También apuntó que ha sido utilizado en los últimos años para fumigar «más de 12.000 hectáreas de robledo» en el sur de la provincia de Lugo y en la de Ourense. Críticas de los nacionalistas La diputada del BNG precisó que el producto en cuestión, denominado Cascade, es de la firma alemana Basf, leyó la información toxicológica que pone en su etiqueta y concluyó que la «prohibición expresa de la UE» es debida a que es «altamente tóxico». «Tiene efectos negativos no solo sobre el medio ambiente y la salubridad del aire y del agua, sino un importante impacto económico para algunos sectores», entre los que citó la apicultura. Paz precisó que como consecuencia de la fumigación de robledo en la comarca de Monterrey con ese mismo producto ha habido en los últimos años una «desaparición» de aproximadamente el «70% de las colmenas». El representante de la Xunta dijo que «no tiene clara esa relación» y, si bien no negó un posible descenso de la población de abejas, apostilló: «No creo que esté relacionado con este tipo de tratamiento». Paz argumentó además que la operación ha generado «contestación social» por parte de los sectores agrícola, medioambiental o sanitario, y reprochó a la Xunta un afán de «prohibir las movilizaciones» y de «intentar acallar a los que no están de acuerdo» con esa iniciativa. Asimismo, cuestionó la falta de «estudios» sobre el impacto que puede tener esa fumigación, preguntó si no hay otras «alternativas», y advirtió de que el citado producto químico deja en situación de riesgo a «muchas especies de flora y fauna», y «pone en peligro a los gallegos».