domingo, 23 de enero de 2011

Medio Ambiente invierte en el estudio de los virus que afectan a las abejas

Madrid, 13 ene (EFE).- Profundizar en el estudio de los virus que afectan a las abejas y en el síndrome de despoblamiento de las colmenas, son los principales objetivos de tres convenios suscritos por Medio Ambiente con Madrid, Andalucía y Castilla -La Mancha.

Según publica hoy el Boletín Oficial del Estado, los tres convenios cuentan con un presupuesto de 300.000 euros anuales, para el próximo trienio-2011/20013 y se enmarcan en el Programa Nacional Apícola.

La actividad económica que genera la existencia de las abejas mueve alrededor de unos 10.000 millones de euros anuales, según estiman los expertos, que destacan, por ello, la pérdida económica que supone la disminución de estos insectos.

En 2005 se detectó el síndrome de despoblamiento de las colmenas y aunque no se conocen las causas de este mal, el mismo provoca la paulatina desaparición de las abejas de la miel.

Investigaciones realizadas en Estados Unidos, donde también se sufre una drástica reducción en el número de colmenas de abejas polinizadoras, apuntan a la unión de un virus y un hongo como causa probable de la muerte de las abejas. EFE

Inseminaciónartificial, también para las abejas Un apicultor ha conseguido desarrollar una técnica que mejora la productividad.

Pican y dan miel. Esto es lo que todo el mundo sabe sobre las abejas, pero lo cierto es que el mundo de estos insectos es mucho más amplio. Con esta filosofía, un "apicultor aficionado" de Zuera ha desarrollado un programa de selección pionero en España. Permite seleccionar a los mejores ejemplares para conseguir una productividad mayor de este tipo de ganadería alternativa.

Lorén trabajó durante 50 años como carpintero, pero su afición por las abejas llenaba todos sus ratos libres. Hasta que llegó su jubilación y pudo dedicarse completamente a la apicultura y toda su investigación comenzó a dar frutos. Este año ha obtenido 39 kilos de miel por colmena, mientras que la media del resto de apicultores de su entorno ha girado en torno a los 14 kilos.

Su técnica se basa en la inseminación selectiva de las abejas reina, para hacerlas más resistentes a las enfermedades y conseguir que sean más productivas. Algo que parece muy complicado, pero que Agustín --que no tiene estudios académicos-- ha conseguido "paso a paso" y sin recibir ningún tipo de ayuda. "He presentado muchas veces proyectos a las instituciones, pero siempre me los han denegado", explica resignado.

Agustín lleva años solicitando la colaboración de un biólogo o un genetista para coordinar el trabajo de campo y el de laboratorio. "De este modo, los avances serían mucho más rápidos", declara el apicultor.

Convenio

El reconocimiento que no le aportan las instituciones, sí que ha llegado a través de sus propios compañeros. Cada año recibe a apicultores de todas partes de España, para aprender sus técnicas. Acaba de firmar un convenio con sus colegas turolenses para recibir clases de Agustín durante dos años.

Lo que más sorprende a los apicultores que acuden a Agustín es sin duda, la mansedumbre de sus abejas. La mayoría no se atreve a manipularlas sin protección, pero Lorén trabaja con toda tranquilidad en manga corta y con sus propias manos. "Y nunca he tenido un disgusto", asegura. Gracias a sus hallazgos, su nombre ha llegado ya hasta el extranjero, puesto que colabora con estudiosos de Inglaterra y Francia en su investigación.

Según Lorén, la apicultura "puede dar mucho de sí", por ello "es necesario que reciba ayudas por parte de las administraciones". En su caso, uno de sus hijos ha seguido su camino y colabora con él en la producción de miel. Asegura que seguirá trabajando por este sector que considera "imprescindible".

sábado, 15 de enero de 2011

ESPAÑA- MÚLTIPLES AYUDAS A LA APICULTURA EN CASTILLA-LA MANCHA

A lo largo del pasado año, la Consejería de Agricultura y Desarrollo Rural puso en marcha una línea de ayudas para el sector apícola por un importe de 1,3 millones de euros con el objetivo de fomentar el mantenimiento de la actividad y mejorar las condiciones de producción y comercialización de la mie. Además, el Gobierno regional dispone de otros instrumentos como la nueva medida agroambiental específica para la apicultura, creada en 2008, y que ha supuesto otros 1,5 millones de euros para el sector, y el nuevo seguro de daños de sequía e incendios. Con respecto a la ayuda específica para las Asociaciones de Defensa Sanitaria (ADS) los apicultores a título principal reciben la ayuda directa de 11 euros por colmena, con un montante anual de 680.000 euros. Las ayudas del llamado Plan nacional apícola se elevaron el pasado año hasta los 650.000 €, de acuerdo con el Reglamento correspondiente de la Unión Europea.

EE.UU.- NO HAY DUDA QUE LOS PESTICIDAS SON LOS CAUSANTES DE LA DESAPARICIÓN DE LAS COLMENAS, FALTA IDENTIFICAR A NIVEL CIENTÍFICO CUÁL DE ELLOS ES EL

Entrevista al Profesor Eric Mussen de la Universidad California Davies, quién dijo que no hay ninguna duda que los pesticidas, como así también la nutrición y las enferemedades de las colmenas, son los causantes del Síndrome de Colapso de las Colmenas, aunque aún no se ha podido vincular a nivel científico, a ningúno de los pesticidas existentes con este flagelo de la apicultura de los EE.UU. y el mundo

MEXICO- EVALUACIÓN DE LA RESISTENCIA DEL ÁCARO VARROA DESTRUCTOR AL FLUVALINATO EN COLONIAS DE ABEJAS (APIS MELIFERA) EN YUCATÁN, MEXICO

Documento elaborado por Jesús Froylán Martínez Puca Y Luis A. Medina Medina
La constante aplicación de piretroides para el control del ácaro Varroa destructor ha ocasionado la aparición de poblaciones de ácaros resistentes a este producto en diversas partes del mundo. Con la finalidad de detectar la posible existencia de poblaciones de ácaros resistentes al fluvalinato en el estado de Yucatán, uno de los principales estados productores de miel en México, se colectó un total de 12 muestras por cada apiario, seleccionando cuatro apiarios donde se ha utilizado de manera constante el fluvalinato para el control de V. destructor por un periodo de cinco años, y una cantidad de muestras similar provenientes de apiarios donde se han utilizado métodos de control alternativo durante un tiempo similar. Para determinar el porcentaje de mortalidad de los ácaros al fluvalinato, estos fueron expuestos a una pieza de 2.5 x 1.0 cm de Apistan® al 10%,
por un periodo de 24 h. El porcentaje de mortalidad de varroas provenientes de apiarios tratados de manera constante con fluvalinato fue de 83.6 ± 0.51 %, inferior al porcentaje de mortalidad obtenido en los apiarios que sólo han recibido tratamiento alternativo el cual fue de 93.9 ± 1.98 %, existiendo diferencias entre ambos grupos (t=-3.93, P=0.01, gl= 46), lo cual indica una reducción en el porcentaje de mortalidad obtenido con el fluvalinato, sin embargo, esta reducción, aun no alcanza los niveles necesarios para reportar la presencia de ácaros resistentes, siendo importante cambiar las prácticas de manejo encaminadas a reducir los niveles de infestación de V. destructor, por lo que es recomendable la aplicación de métodos de control alternativo los cuales no ocasionan el desarrollo de resistencia en las poblaciones de ácaros.

Euskadi trata de frenar a la avispa asiática

Preocupación entre los apicultores vascos, dado que la avispa, que procede de Francia, es capaz de arrasar una colmena en pocas horas
El Gobierno vasco detecta en Guipúzcoa ejemplares del insecto invasor, que ataca a las abejas

Es una guerrera temible. Diez de ellas se bastan para arrancar la cabeza de miles de adversarias y devorar sus cuerpos en pocos días. Se reproducen de manera fulgurante y ya están en Euskadi. Han llegado a Irún, Hondarribia y Oiartzun, pero pronto se extenderán a otras zonas si no se hace nada para evitarlo. Su nombre científico es 'Vespa velutina' y se la conoce como avispa asiática. La batalla, según garantiza el Gobierno vasco, ha comenzado.
Se trata de una especie invasora que se alimenta preferentemente de abejas domésticas comunes, lo que ha puesto en pie de alerta a los apicultores vascos, que temen que la voracidad de las nuevas avispas ponga en peligro sus colmenas. De momento, sólo las guipuzcoanas, pero nadie está seguro de que la avispa no se extienda con rapidez a otros territorios limítrofes. En un intento de atajar la plaga, o por lo menos de frenarla, el departamento vasco de Medio Ambiente ha puesto en marcha medidas de control a través de la colocación de trampas en colmenares y de la destrucción de avispas reina y de los nidos del insecto invasor.
La presencia de avispas asiáticas fue detectada el pasado verano por la Asociación de Apicultores de Guipúzcoa, que envió varios ejemplares a los laboratorios de Neiker-Tecnalia. Su diagnóstico fue preocupante. Los investigadores llegaron a la conclusión de que las muestras procedían de diferentes nidos y, por tanto, concluyeron que su aparición no era casual, sino que se estaba produciendo un desplazamiento de enjambres desde Francia a este lado de la muga.
El pasado mes de noviembre, cuando se conocieron los resultados de los análisis, los apicultores guipuzcoanos difundieron un mensaje inquietante. «Ya la tenemos entre nosotros, se expandirá rápidamente y debemos aprender a controlarla», dijeron. Fue la misma alarma que habían lanzado en 2005 sus colegas de la zona de Aquitania, en Francia, donde a finales de ese año se detectó por primera vez en Europa a la avispa asiática.
La 'Vespa velutina' viajó hasta el continente sobre una fruta de caqui que llegó al puerto de Burdeos dentro de un contenedor repleto de alfarería o madera importado de China. Desde allí, se extendió con una enorme rapidez a 32 departamentos del sur de Francia.
La avispa asiática vive al norte de la India, en China y en las montañas de Indonesia, en zonas con climas comparables al del sur de Europa, lo que hace temer que se aclimate fácilmente a su nuevo hábitat. Los expertos consideran que las condiciones atmosféricas actuales son especialmente favorables a la multiplicación de especies originarias de regiones más cálidas, por lo que entienden que el riesgo existe.
Inconfundible
Su aspecto es inconfundible. Mide alrededor de 3 centímetros y las reinas pueden alcanzar 4 o 5 centímetros. Tiene una coloración oscura y patas de color marrón amarillas en los extremos. Los investigadores creen que es poco violenta hacia los humanos ya que hasta ahora no ha mostrado ninguna señal de agresividad particular, ni en vuelo ni cerca de su nido, incluso en presencia de movimientos humanos importantes o de fuertes ruidos.
Entre las medidas que hasta el momento han obtenido algunos resultados contra la plaga se hallan la reducción de la entrada a las colmenas de las abejas, la captura con trampas de avispas asiáticas sobre los colmenares de fecundación y la destrucción de nidos. Encontrar estos últimos no es difícil. Son esféricos, del tamaño de un balón de balonmano a uno de fútbol y están colgados en árboles a gran altura, por encima de los cuatro metros.
Las abejas autóctonas de Euskadi no 'saben' todavía cómo defenderse de la nueva especie, algo que sí han aprendido las originarias de Asia. Allí, las abejas rodean a la invasora en grupos numerosos formando una bola y generan por acumulación una temperatura elevada que les permite defenderse.

domingo, 2 de enero de 2011

campoo de yuso Jornadas de apicultura ecológica en el Centro de Visitantes del Embalse del Ebro


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Este fin de semana, el Centro de Visitantes del Embalse del Ebro, gestionado por la Consejería de Medio Ambiente a través del CIMA y ubicado en Corconte, localidad del municipio de Campoo de Yuso, organiza unas jornadas de apicultura ecológica.
La actividad, que será impartida por Urbano González Escapa, propietario de miel ecológica Urzapa, dará comienzo el sábado, día 27, a las 10 horas. Los productos de la colmena tanto extracción como elaboración, junto con diferencias entre apicultura ecológica y convencional, además de enfermedades de las abejas y tratamientos ecológicos, son algunos de los temas que se tratarán. Las jornadas finalizarán el domingo 28 con catas de miel.
El Centro de Visitantes del Embalse del Ebro
El Centro de Visitantes del Embalse del Ebro, en Corconte, aborda el ciclo integral del agua. Asimismo ofrece la posibilidad de realizar visitas guiadas o autoguiadas, en las que se tratan la importancia del agua, cómo se emplea y distribuye en Cantabria, y las particularidades del Embalse del Ebro. Pertenece a la Red de Centros de Visitantes de la Consejería de Medio Ambiente, gestionado por el CIMA, y cuyo objetivo es divulgar contenidos temáticos asociados al entorno o a las posibilidades que ofrece su localización. El Centro de Fontibre está dedicado al Ebro, el de Monte Hijedo, en Riopanero, al bosque; y el de La Puente del Valle, a las construcciones pastoriles de piedra sin argamasa. También se incluye el Observatorio Astronómico de Cantabria, situado en el Páramo de La Lora. A ellos, se ha sumado recientemente el Centro de Visitantes de los Caminos de la Harina, en Pesquera, que contribuye a difundir el patrimonio territorial del corredor harinero del Besaya.

La apicultura, protagonista en La Puente del Valle

La Consejería de Medio Ambiente, a través del CIMA organiza este sábado y domingo, días 4 y 5 de diciembre, las III Jornadas de Apicultura del municipio campurriano de Valderredible, en el Centro de Visitantes de la Piedra en Seco ubicado en la localidad de La Puente del Valle.
Las jornadas de dos días consecutivos constan de exposición, charlas, audiovisuales, catas de miel y talleres, destinados tanto a mayores como a pequeños, excepto la jornada del sábado que está reservada a personas adultas estrechamente relacionados con la apicultura y, el domingo para todas las edades.
El sábado se iniciará la jornada con una exposición temática de aperos viejos y modernos de apicultura, dujos, colmenas modernas, además de decantadores y extractores. Ya por la tarde, a partir de las 16 horas tendrá lugar una charla coloquio a cargo de José Manuel Álvarez apicultor perteneciente a “ S.A.T. Erica Campoo” cooperativa que se creó en 1.996 y que se dedica a la extracción, envasado y comercialización de miel en Cantabria. En la actualidad la componen 10 socios con unas 2.500 colmenas y una producción media entre 30.000 y 35.000 kilos de miel principalmente mono floral de brezo. Es una de las marcas que comercializa con la marca de calidad “CC” que otorga la consejeria de ganadería a través de ODECA.
A las 18 horas, el apicultor de La Puente del Valle, Luis Chomón, será el encargado de enseñar a través de una explicación y un taller el método de fabricación de láminas de cera de una forma tradicional.
La jornada del domingo está dedicada a los más pequeños de la casa y a los mayores con inquietudes sobre este curioso mundo de las abejas. A las 11,30 horas está programada una charla amena, educativa y divertida para todo tipo de público cuyo objetivo es la introducción y conocimiento del mundo de la apicultura. El maestro de ceremonia será una vez más José Manuel Álvarez.
A continuación, a eso de las 13 horas aproximadamente, tendrán lugar unos talleres en los que se pondrá en práctica los conocimientos adquiridos. Los talleres a realizar son la elaboración de velas a partir de cera de abeja y un nuevo taller en el que se elaborarán abejas con tela de fieltro.

Asturias hace mil lunas de miel

La producción apícola cuenta con una larga tradición y cuatro variedades básicas, según la especie polinizada: castaño, eucalipto, brezo y mil flores
Oviedo, M. J. IGLESIAS

Los apicultores citan con frecuencia una frase atribuida a Einstein: «Si la abeja desapareciera de la Tierra, al hombre sólo le quedarían cuatro años de vida; sin abejas no hay polinización, ni hierba, ni animales ni hombres».

Aunque la afirmación parezca algo exagerada, Christian Ozers la suscribe y aprovecha para reclamar mayor protección para el sector apícola regional. Los apicultores cuentan con varias líneas de ayudas. La principal llega a través del plan apícola nacional, del que se beneficiaron en 2009 un total de 17 productores -uno de ellos la Federación de Asociaciones de Apicultores-, que se repartieron 100.000 euros. Otras subvenciones llegan a través de la prima de polinización, que en 2009 distribuyó 117.500 euros entre 130 apicultores.

En Asturias se elabora desde hace siglos miel de brezo, de castaño y de mil flores. Lo de las mil flores no es una metáfora. Los científicos han constatado que las abejas asturianas polinizan más de novecientas especies de plantas. La llegada del eucalipto también proporcionó nuevas variedades. Precisamente el principal encanto de la región reside en la existencia de diferentes zonas de producción, que dan lugar a varios tipos de miel.

En el Occidente predomina la de brezo, recolectada por los «abejeiros» en municipios como Boal, Allande y Cangas del Narcea. En las Cuencas y en la zona central de Asturias la reina es la miel de castaño, y en la franja costera, la de mil flores y de eucalipto.

Los apicultores defienden que las abejas aseguran la fecundación del 60 al 80 por ciento de las especies vegetales. Desde hace millones de años estos insectos obtienen su ración de alimento de las flores y realizan una tarea silenciosa y poco valorada: la polinización.

La apicultura en Asturias es una tarea tradicional. El primer censo de colmenas en Asturias data del siglo XVIII. Está incluido en el catastro del marqués de la Ensenada y en esa centuria anota más de 65.000 colmenas. En aquella época sus pobladoras eran las abejas silvestres que se encontraban por todos los montes. Ahora apenas quedan.

Las abejas salen zumbando


El misterioso «síndrome del despoblamiento» y la presencia de dos parásitos ponen en peligro la producción apícola asturiana
Oviedo,

María José Iglesias

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Un peligro mortal acecha las 28.000 colmenas asturianas. Dos parásitos, la varroa y el nosema, siembran la destrucción en los panales y matan miles de abejas. Cuantificar las bajas es complicado. Los apicultores estiman pérdidas de un 30 por ciento de insectos por colmena. Un enjambre puede tener hasta 100.000 «inquilinas». Son un ejército con millones de efectivos que se enfrentan a una demoledora epidemia.

A los parásitos les acompañan otros «misterios». Silenciosamente, las abejas desaparecen, en España, primer productor de miel de la Unión Europea, y en Asturias. Además de la varroa, que vive de la sangre de las abejas, y el nosema, que ataca el aparato digestivo de los insectos, algunos meten en la coctelera mortal el cambio climático, los pesticidas, la calidad del polen e incluso las radiaciones de los teléfonos móviles. Todo en conjunto ha sido bautizado como «síndrome de despoblamiento de las colmenas».

La mecánica es siempre la misma. De pronto, un día las colmenas se quedan desiertas, sin rastro de cadáveres de abejas. Varios trabajos de investigación realizados en España y Francia lo achacan también al uso de «neonicotinoides», que provocan la pérdida del sentido de la orientación en los insectos.

El caso es que los 1.269 apicultores asturianos, de los que sólo unos veinte son profesionales, observan con horror que las colmenas pierden músculo.

El pasado invierno, el más crudo en décadas, ha sido demoledor. El frío ha debilitado los insectos. La consecuencia es que los ácaros han encontrado vía libre para matar. Los apicultores están hartos de ver cómo las enfermedades acaban con las abejas.

En realidad, es un círculo vicioso. Al disminuir la población de abejas, se dispara la varroa. Christian Ozers, de Cabranes, presidente de la Federación de Asociaciones de Apicultores de Asturias (FAPI), constata que la población de abejas en Asturias baja de manera alarmante. No obstante, para Ozers el problema más grave de la apicultura asturiana es el despoblamiento rural. «Si no hay quien cuide los enjambres, no sobreviven».

La ausencia de abejas también altera el ecosistema. El principal beneficio de los insectos más laboriosos es la polinización. La Asociación de Cosecheros de Manzana ha implantado colmenas en las pomaradas para facilitar la labor. En las zonas de montaña la presencia de abejas facilita la vida al oso pardo y al urogallo. Así ha sido durante siglos.

Para Ozers, la famosa «huida» de las abejas es la suma de un amplio elenco de enfermedades derivadas de la presencia de parásitos. El alto Aller es la zona que sufre con mayor virulencia la mortalidad de las abejas. Ozers asegura que a pesar de los problemas, la apicultura tiene futuro y proyección en Asturias. La apicultura requiere una inversión mínima. La miel se recolecta directamente de los panales y apenas requiere tratamiento, aparte del envasado. Alrededor de la actividad se desarrolla la producción de velas e incluso proyectos de educación ambiental.

La producción oficial de miel en la región alcanza 600.000 kilos anuales. La mayor parte se vende en ferias. Un pequeño porcentaje se comercializa a través de distribuidores nacionales y llega a otras comunidades. El precio medio por kilo alcanza los siete euros. Asturias lidera el consumo de miel en España, con 1,4 kilos de media por habitante. La media española está en medio kilo.

Por la región se reparten varias asociaciones de apicultores. Una de las más numerosas es la de Gijón, que cuenta con más de 300 socios. Santos González, vocal y ex presidente de esta entidad, lamenta que los tratamientos cada vez son menos eficaces. En lo que va de año ha perdido cinco colmenas por estas enfermedades. «Las tratamos en otoño y en primavera, pero el parásito muta y se va volviendo inmune», indica. La abeja asturiana, más pequeña y oscura que sus «primas» del centro y sur de la Península, es un tesoro de la fauna regional. Ha sido objeto de estudio en la Universidad de Córdoba. El director general de Ganadería, Luis Miguel González, asegura que Asturias puede llegar a ser una potencia apícola. Eso si sobrevive a los parásitos.

La llegada del avispón asiático pone en alerta a los apicultores gallegos

Ha aparecido en Irún y su especialidad es la caza de abejas al vuelo. Devora colmenas enteras y es más peligroso que la autóctona «Vespa cabro», que atacó en Ourense
La aparición en Irún de la avispa asiática Vespa velutina nigritorax ha puesto en alerta a los apicultores gallegos, puesto que su expansión ha sido rápida desde su detección en Francia en el 2005. Según el instituto vasco Neiker de investigación agraria, llegó en un contenedor chino al puerto de Burdeos y pronto se ha expandido por más de 30 departamentos franceses, donde es un voraz depredador de abejas melíferas autóctonas. Al no ser un enemigo natural, sino introducido, aún no han desarrollado una estrategia de defensa eficaz como para hacerles frente. Sus parientes abejas asiáticas, Apis cerana, sí son capaces de rodearlas y elevar la temperatura hasta matar a las intrusas en las colmenas.

El avispón asiático, originario de China, la India e Indonesia, triplica en tamaño a la abeja europea y se distingue fácilmente del avispón autóctono Vespa cabro, ya que este tiene el tórax rojizo y el abdomen negro y amarillo, mientras que el abdomen del invasor es de color negro o marrón oscuro (excepto una franja caudal amarilla) y en la cabeza negra su frente es anaranjada. Los extremos de sus patas también son amarillentos. «Aquí de momento non chegou, pero imos organizar unha rede de alerta e contactaremos cos colegas vascos», dice la veterinaria Ester Ordóñez, presidenta de Mel de Galicia y de la Asociación Galega de Apicultores.

«Tivemos avisos -añade Ordóñez-, na zona de Bande (Ourense) sobre avespas algo máis grandes do habitual, pero son as daquí, que poden matar dúas ou tres abellas. As asiáticas realmente arrasan as colmeas». Esta veterinaria no desdeña el peligro que puedan suponer para la apicultura si son capaces de adaptarse al clima del norte de la Península, y recuerda que aún hoy se deben tratar las colmenas con medicamentos para defenderlas de la varroa, un ácaro procedente del sudeste asiático detectado en Grecia en 1975 y que diez años más tarde ya invadió la cabaña apícola española. La varroasis es hoy el principal problema sanitario junto al más reciente y no aclarado síndrome de despoblamiento.

Difícil control

Al igual que las avispas europeas (en España hay unas 30 especies de véspidos), las asiáticas son carnívoras y cazan de día las abejas obreras. Las decapitan con sus mandíbulas y con ellas alimentan a sus larvas. También devoran las crías de abeja dentro del enjambre. Poseen aguijón y el hecho de que aniden en lo alto de los árboles, en colonias de más de mil individuos, complica su control. No obstante, bomberos o apicultores suelen conocer el manejo de la Vespa cabro, no muy común, pero que ataca igualmente con agresividad si es molestada.

Unas y otras son beneficiosas para la polinización y controlan otras plagas pero, consciente del recelo que generan abejas y avispas en las personas, Ester Ordóñez dice que las primeras pican solo al defender su territorio. «O normal é que as picaduras sexan de avispas, máis agresivas no verán». La mayoría de casos atendidos son al practicar actividades de ocio o trabajar en el campo. Se desaconsejan movimientos bruscos ante ellas, llevar ropas claras u olores fuertes, comer y cocinar al aire libre.

Evitar riesgos

Los niños pueden ser más propensos a recibir picaduras por su curiosidad con los bichos y actividad en piscinas, frecuentadas por avispas. Sus casos no revisten mayor gravedad que en adultos pero hay que distinguir entre las merodeadoras y las de avisperos próximos a colegios o parques. La picadura puede provocar dificultad para respirar, vómitos, mareos, desvanecimiento, caída de tensión arterial o un choque anafiláctico fatal si no se trata con rapidez. La prevención es la vacuna antialérgica específica tras reaccionar mal ante una picadura. Se calculan en más de 800.000 los alérgicos españoles al veneno de insectos.

«La vacuna protege al 99% de los alérgicos al veneno de los géneros 'Vespula' y 'Polistes'»


El alergólogo Francisco Javier Carballada dice que raro es el año que no fallece algún gallego por la reacción fatal ante la picadura de abejas o avispas. Desde hace 16 años, solo en el área sanitaria de Lugo y Monforte que él atiende, ha diagnosticado y tratado a 637 alérgicos al veneno de estos himenópteros.

-¿Suponen un problema sanitario importante?

-Estamos en una zona de gran actividad agrícola y apícola, con una población muy ruralizada. Las abejas y avispas son polinizadores importantes, pero hay que tener cuidado en actividades familiares como la vendimia, recogida de la miel y la fruta.

-¿Es más peligrosa la picadura de abeja o de avispa?

-El que es alérgico a una, no lo es a la otra. Las reacciones más graves se producen con abejas, pero en un alérgico es grave en ambos casos. La picadura puede producir desde una hinchazón local hasta una urticaria generalizada con dificultad respiratoria y choque anafiláctico.

-Pero la vacuna protege.

-Al 97% de los pacientes frente a las abejas, y al 99% de los alérgicos al veneno de las avispas de los géneros Vespula y Polistes . Entre estas dos últimas, la reactividad cruzada es parcial. No dejan el aguijón y hay que afinar el diagnóstico. Para las Polistes solo tenemos extractos desde hace tres años. Respecto al avispón Vespa cabro , no abunda y su picadura es menos frecuente. Los abejorros del género Bombus (abellón o abesouro en Galicia) también pican y la vacuna es la misma que para los alérgicos al veneno que inocula la abeja.

-¿Cómo los inmunizan?

-Es progresivo. Tras las primeras dosis, hay varias de mantenimiento durante todos los meses del año.

Abejas y avispas locales matan cada año a 20 españoles, y los nuevos insectos causan perjuicios económicos y sanitarios

La Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica (Seaic) ha llegado a estimar entre 15 y 20 personas las que mueren cada año por el veneno de avispas y abejas. El último incidente grave con véspidos en Galicia ocurrió a finales de septiembre. Un hombre de 60 años falleció en su viñedo de Chantada tras ser picado en la cabeza. Los apicultores también deben ser precavidos, aunque la inmunización es eficaz. En un estudio con 606 alérgicos lucenses tratados con vacunas desensibilizantes, 219 tuvieron repicaduras sin reacción alérgica. La mayoría solo sufrirá molestias locales. Personas no alérgicas han podido sobrevivir al veneno de cientos de picaduras. La distancia entre colmenas y casas está regulada.

Picadura distinta

La abeja inocula veneno con un aguijón tipo arponcillo y muere al quedar eviscerada. Pero la avispa no pierde el aguijón y puede repetir el ataque, por lo que es mejor alejarse. Los véspidos también pueden morder con sus mandíbulas pero, según algunos agricultores, solo pican si se sienten amenazados.

En primavera y verano crece el número de avispas, y con el otoño declina, por eso están más nerviosas al cuidar a las jóvenes reinas, únicas que sobrevivirán al invierno. Remover un avispero del suelo puede desencadenar un ataque. Evitar andar descalzo o mantener la basura lejos y cerrada, sellar huecos en árboles y edificios son consejos para los alérgicos. Muchos llevan a mano una dosis de adrenalina para inyectársela de urgencia.

Peligrosos polizones

La Vespa velutina es otro de los varios insectos llegados por vía marítima a Europa. Algunos han derivado en plagas con graves implicaciones económicas, como el gorgojo del eucalipto que tocó Galicia en buques con madera importada. La introducción de la avispilla australiana que lo parasita no lo controla totalmente. En otros casos son escarabajos que matan palmeras, o mosquitos. El Aedes albopictus, mosquito tigre asiático, fue introducido en Cataluña en una partida de neumáticos usados.

El mismo bicho apareció al inspeccionar cargamentos de bambú llegados a puertos holandeses, donde han vuelto a localizar más mosquitos tigre en ruedas de avión importadas. Preocupa el establecimiento de especies exóticas favorecido por el comercio internacional, pues pueden ser vectores de virus como el dengue o el chikungunya. Otros polizones ya presentes en Europa son el mosquito de la fiebre amarilla, Aedes aegypti, o el norteamericano Aedes atropalpus.

Escolares ponteses podrán participar en talleres de las jornadas apícolas

El programa se iniciará en octubre con la proyección de vídeos y actividades sobre los insectos
Los escolares ponteses podrán participar en diferentes actividades vinculadas al mundo de las abejas en una nueva edición de las Xornadas Apícolas, que se desarrollarán los días 4 y 5 del próximo mes de octubre. En esta ocasión, el programa contará con diferentes iniciativas que tendrán como objetivo acercar el mundo de la apicultura a los más pequeños. Para los más mayores los actos arrancarán el 6 de octubre con la Cata de Meles que se celebrará en las mismas dependencias de la Casa do Mel, de donde saldrá la miel clara y oscura de esta temporada.

Para participar en este certamen será necesario entregar una muestra en estas instalaciones antes del próximo lunes 20 de septiembre, en un bote de 1 kilo sin ningún tipo de etiqueta.

La tarde del día 8 de octubre estará protagonizada por un curso sobre las enfermedades de las abejas, que arrancará a las seis de la tarde y que estará impartido por Francisco José Orantes, de los laboratorios granadinos Apinevada. Las plazas para asistir a esta conferencia serán limitadas y será necesario apuntarse en la Casa do Mel.

Como broche de oro, el 9 de octubre continuarán las charlas de la mano de este especialista y bajo el título A calidade do mel . Ese mismo día tendrá lugar la segunda Feira do Queixo do Eume e Mel de Goente, una cita que arrancará a las once de la mañana con la apertura de los puestos.

ESPAÑA- EN EXTREMADURA SE HA DUPLICADO LA CANTIDAD DE COLMENAS QUE TIENE QUE TENER UN APICULTOR PARA SER RENTABLE

Entrevista al Veterinario Jose Antonio Babiano Serrano, presidente de la cooperativa apícola de segundo grado Euromiel, quién comenta que sin las ayudas que posee la apicultura, sería imposible llevar adelante la actividad en la región de Extremadura. Agrega que a pesar de ello el aumento de los costes de producción ha hecho que de 500 colmenas que era la unidad económica hace unos años, ahora es imposible subsistir sin disponer de al menos el doble de cantidad.

NUEVA ZELANDA - VOCES EN CONTRA DEL CAMBIO DE UN GEN DE LA VARROA PARA PRODUCIR SU AUTO DESTRUCCIÓN

La varroa es la principal causa de la muerte de las abejas en todo el mundo y le cuestan a la industria apícola millones de dólares al año. Investigadores de la Universidad de Aberdeen en Escocia, afirman haber descubierto una manera de cambiar un gen en el ácaro, que eventualmente podría hacer que se ataque a si mismso y se destruya. Pero el portavoz de Suelo y Salud, Steffan Browning, dice que la ingeniería genética de los ácaros varroa para su auto-destrucción no es un regalo de Navidad para los apicultores. Él dice que la manipulación del ADN del ácaro podría empeorar la varroasis de lo que ya es, o tener otros efectos no deseados sobre las abejas y los ecosistema indígenas.