Alemania y Francia, los consumidores de miel por excelencia

«Son nuestros mejores compradores y eso es una gran noticia». Antonio Prieto resalta las bondades que presenta el mercado alemán y, tras él, el francés, como dos destinos muy apetecibles para que los extremeños coloquen su miel. Por la demanda y por el precio que pagan. Gracias a esa combinación, la tradicional competencia de la miel china, de mucho menor calidad que la nuestra pero cuatro o cinco veces más barata también que la autóctona, se sobrelleva mejor. La Unión Europea importa cerca del 40% de la miel que consume. Cuentan los expertos que el mercado alemán de la miel es el más importante del mundo, ya que ningún otro país presenta un déficit de producción interna tan alto como él, lo que le obliga a importar casi todo el producto para cubrir las necesidades de autoabastecimiento. El comercio apícola internacional en gran medida está dominado por alemanes, con importadores sobre todo radicados en Bremen y Hamburgo. Prácticamente el 90% del comercio europeo está en sus manos. Ese porcentaje baja al 40% cuando se habla del mundial. Los datos señalan que los apicultores de Extremadura venden aproximadamente un millón de kilos entre Alemania y, en menor medida, Francia. También se coloca el producto, aunque en este caso polen, a Holanda. El polen español es el más apreciado allí no solo por su color y sabor característico sino también por la mejor técnica de recogida y preparación. Las mieles extremeñas con más aceptación en el mercado alemán son la de encina. Es la más apreciada por los importadores y envasadores, que la consideran idónea para reforzar el color y el sabor de otras mieles de bosque, más baratas y de peor calidad, como pueden ser la griega o la turca. Prieto destaca que la exigencia de calidad que reclaman alemanes y franceses hace desechar prácticamente la compra de China, a pesar de la brutal diferencia de precio. A granel, un kilo de miel extremeña puede pagarse entre 2,40 y 2,50 euros, mientras que la asiática se sitúa entre 0,60 y 0,70 céntimos de euros/kilo. Argentina es otra gran exportadora. Su relación calidad/precio es similar a la extremeña. En España, los extremeños venden también cerca de un millón de kilos a Mercadona, el gigante de la distribución alimentaria. Según datos de la FAO (organización para la alimentación y la agricultura) a finales de 2009, la producción mundial de miel rondaba los 1,3 millones de toneladas, de las que un 22% eran de China, seguida de la Unión Europea, que produce casi el 13%, y Estados Unidos y Argentina, con un 6% cada país. En España se explota el 17,5% de la cabaña apícola de la UE, seguida de Grecia, Francia e Italia. En 2008, el Ministerio de Agricultura tenía contabilizadas más de 2,4 millones de colmenas, muy por encima de las 1,4 de Grecia y 1,3 de Francia.