martes, 28 de junio de 2016

Economía

La avispa asiática ha llegado a Aragón

 

Uno de los ejemplares de avispa asiática localizados por agentes de Protección de la Naturaleza.Heraldo


La avispa asiática ya está en Aragón. Agentes de Protección de la Naturaleza del Gobierno de Aragón detectaron la pasada semana la presencia de esta especie invasora de nombre ‘Vespa velutina’ en la localidad zaragozana de Salvatierra de Esca (comarca de la Jacetania). Allí, sobre el techo de un leñero situado en el centro de la población, hallaron un pequeño nido cuyos ejemplares fueron identificados como correspondientes a esta especie exótica, fácilmente distinguible tanto por su tamaño –la reina llega a medir unos 3,5 cm y la obrera, 2,5 cm– como por la coloración de su cuerpo –más oscura, de tórax marrón negruzco aterciopelado y solo posee una franja amarilla en el cuarto segmento–. Los ejemplares han sido enviados a la unidad de Biodiversidad del Servicio Provincial de Desarrollo Rural y Sostenibilidad.

Aunque bautizada con el sobrenombre de avispa asesina, esta especie no presenta un riesgo mayor para la población que no sea el de exponerse a una picadura común como la de la avispa autóctona o cualquier abejorro, según los expertos. Pero su presencia despierta la alarma en el sector agrario, especialmente entre los apicultores. Y es que la base de la alimentación de esas avispas, cuya distribución original y natural se da en el sur de la India, Tailandia, China, Laos, Vietnam, Malasia e Indonesia, son las abejas adultas, aunque también forman parte de su dieta otros insectos o la fruta madura.

"Esta avispa causa graves daños, no solo porque hacen mermar la población a abejas autóctonas, sino también porque el miedo que les produce esta especie invasora hace que no salgan de la colmena y, por lo tanto, no producen miel", señaló ayer Rafael Blanc, veterinario especialista en Sanidad y Producción Apícola y responsable de la ADS Apícola de Huesca (Asaja). Blanc, que aseguró no tener noticia ni constancia de la presencia de ‘Vespa velutina’ en Aragón, insistió en que la única forma de hacer frente a esta especie es "prevenir, y si se detectan nidos, destruirlos".
 Por eso, para controlar una posible invasión de avispa asesina y frenar su expansión se aconseja a todos los ciudadanos, en general, y a los apicultores y aquellos colectivos que realizan actividades en el medio natural, en particular, que ante cualquier sospecha de la existencia de un nido de ‘Vespa velutina’, es aconsejable alertar al servicio de Protección de la Naturaleza de Aragón.

"Era cuestión de tiempo"

El representante del sector apícola en UAGA, Pedro Loscertales, aseguró también no tener constancia de la presencia de la temida especie, pero reconoció que "era cuestión de tiempo" que se avistara en la Comunidad "porque la teníamos en todas las regiones de nuestro alrededor". En Europa fue descubierta a finales de 2005 en el suroeste de Francia, aunque parece que su llegada tuvo lugar un año antes en un contenedor de madera procedente de China. Tras extenderse por el país vecino, "con una progresión y rapidez colonizadora espectacular", las primeras observaciones en España se dieron en el País Vasco y Navarra, pero también se han detectado en Cataluña, Galicia o Baleares.

Loscertales insistió en el "grave problema" que supone esta especie invasora, que en Comunidades como el País Vasco –la más afectada– no solo ha causado daños en las colmenas sino también en la fruticultura, especialmente en la vid, y en el propio ecosistema ya que captura y desplaza a otros insectos.

El representante de UAGA destacó que la organización agraria tenía previsto solicitar al Gobierno de Aragón la instalación de trampas –como ya se utilizan en otras regiones– para frenar su expansión y deseó que "no sea demasiado tarde para actuar".

Desde esta organización agraria, que advierte que "esta plaga puede costar mucho dinero", llevan años insistiendo en la necesidad de tomar medidas urgentes, como establecer una red de vigilancia de avistamiento de nidos e insectos que pueda disponer de todos los datos que aporten particulares, apicultores y agentes medioambientales. Y para ello, han solicitado en varias ocasiones la conveniencia de hacer una campaña informativa sobre cómo son los nidos y las avispas.