sábado, 7 de noviembre de 2009

Montroy confía en que Fivamel sirva para solucionar los problemas del sector


a Feria Valenciana de la Miel, que tendrá lugar del 6 al 8 de noviembre, presenta su nueva bebida oficial
Un año más se presenta una nueva edición de la Feria Valenciana de la Miel, Fivamel, de Montroy que se celebrará del 6 al 8 de noviembre.
El alcalde de esta localidad, Antoni Polo, ha expresado su deseo de que Fivamel sirva de puente entre la administración y los apicultores «para resolver problemas que se arrastran desde hace años y que no nos pueden llevar a ningún buen fin. La función de las abejas es necesaria para el medio ambiente y la feria puede ser el mejor foro para dar a conocer todas las opiniones y llegar a acuerdos necesarios».
En la misma presentación se ha dado a conocer la que será bebida oficial de la feria, un combinado de zumo de naranja y miel de azahar, realizado por la empresa valenciana Mieles Sala-Higón que ha envasado unas 2.000 botellas de este néctar para que pueda ser degustado por los asistentes a la feria.
«El zumiel es el combinado ideal entre el fruto de los agricultores, las naranjas, y los apicultores, la miel valenciana que se elabora a partir del azahar. Será el símbolo que ha de marcar una nueva etapa», ha señalado el alcalde.
La feria de las abejas ha aprovechado este acto en el Bioparc de Valencia para presentar el cartel de Fivamel, realizado este año por el artista plástico Manuel Boix, así como las actividades que, a partir del día 6 de noviembre, desde la plaza de España, se irán sucediendo en Montroy.
Entre las actividades se celebrarán unas jornadas en las que se reivindicará que la abeja y, por extensión, la apicultura, sean declaradas Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.
El director de Fivamel, Carles Galletero, presentó también el programa de actividades, junto con la edición del libro 'Camins de Mel', que será entregado de forma gratuita a todos los asistentes.
Diez mil libros, mucho zumiel y la voluntad de alcanzar el récord histórico de venta de miel, turrones y productos de las abejas antes de la campaña de Navidad.

«El año pasado se vendieron 50.000 kilos de miel en tarros, sin embargo, de lo que más satisfechos estamos es de la labor de concienciación que llevamos a cabo a favor de las abejas desde este evento de tipo lúdico, comercial y, sobre todo, familiar», ha destacado el director de Fivamel.