jueves, 21 de abril de 2016

ApiADS denuncia crecientes casos de intoxicación y envenenamientos en la floración de cítricos

 

ApiADS ha denunciado la oleada creciente de casos de intoxicaciones y envenenamientos de colmenas en la floración citrícola de este año. La situación, explican, “se ha agravado considerablemente, estamos teniendo numerosos casos intoxicaciones y además llevamos ya tres casos consecutivos de envenenamientos totales directos de colmenas”.
La Agrupación de Defensa Sanitaria Apícola ha solicitado una reunión urgente con la Conselleria de Agricultura, Medio Ambiente, Cambio Climático y Desarrollo rural, “para buscar soluciones y poner freno a esta oleada creciente de irregularidades y actos vandálicos”.
Desde 2012, señalan, “nuestra Agrupación de Defensa Sanitaria Apícola viene realizando campañas de seguimiento de las intoxicaciones de abejas principalmente durante las floraciones de frutales de hueso y cítricos”. Explican que se ha realizado un seguimiento en colmenas experimentales con trampas de mortalidad para recoger abejas en piquera y también se han recogido muestras de los apicultores de apiADS después de constatar casos graves de intoxicación supuestamente por el uso de insecticidas durante la floración de forma irregular.
Una buena parte de los resultados de las campañas 2012, 2013 y 2014 se han publicado en la revista técnica de apicultura Apicultura Ibérica, y también en la revista científica Science of the Total Enviroment. En el caso de los frutales de hueso, se han analizado entre 2012 y 2015 un total de 30 muestras de abejas intoxicadas procedentes de zonas de frutales tratados (principalmente nectarinos) de Murcia y Valencia. En 26 de las 30, casi un 90% de las muestras, se detectó la materia activa metiocarb, un carbamato muy tóxico para las abejas, con una concentración media de 551 nanogramos/gramo, que aproximadamente equivale a unos 55 ng/abeja, un valor muy significativo como responsable de mortalidad de abejas por ser un 25% de la dosis letal 50 del metiocarb. Hay que tener en cuenta, puntualizan, “que algunas muestras de abejas han perdido una parte de los residuos al permanecer algunos días en campo hasta que son recogidas”.
Esta información ha sido “transmitida reiteradamente” al Servicio de Protección de los Vegetales y al Servicio de Producción y Sanidad Animal de la Conselleria d’Agricultura de la Comunidad Valenciana, pero, se lamentan “no se ha traducido en una adecuada labor de inspección porque los casos de intoxicaciones no están disminuyendo. Al contrario, durante la presente campaña se han vuelto a registrar numerosos casos en floración de nectarinos de los cuales pronto tendremos los resultados”.
Creemos, continúan explicando los responsables de apiADS “que la información que se pone de manifiesto constituye una violación de las normas de registro de productos insecticidas como clorpirifos, dimetoato y metiocarb, aplicados en floración, amenazando no solo a las abejas sino también a todos los insectos polinizadores y fauna auxiliar que lucha contra plagas agrícolas. En otros casos se han detectado productos prohibidos como el fenitrotión o el mismo imidacloprid que está sujeto a una restricción especial de la Unión Europea”.
Además señalan que se han producido recientemente 3 casos sucesivos de actos vandálicos, en diferentes localidades Valencianas (Cheste, Bétera y Masamagrell) que han supuesto el envenenamiento directo de más de 500 colmenas “que han sido salvajemente masacradas en su totalidad por la aplicación directa de productos insecticidas que se utilizan habitualmente en la agricultura. El último de estos actos vandálicos delictivos ha sido en Massamagrell, –en la foto se muestra la crueldad de estos actos delictivos– dónde más de 200 colmenas han sido totalmente envenenadas ”.
apiadsmass
Destacan el apoyo de la organización ecologista Greenpeace en denunciar todos estos casos de mortandades de abejas y ambos consideran que la solución solo pasa porque “las autoridades competentes extreme los controles para que no se sigan aplicando estos productos en floración”. Además consideran “que se debe poner en marcha un plan de acción integral para salvar a las abejas y otros insectos polinizadores que contemple un calendario claro para la eliminación de los productos peligrosos para las abejas, empezando por los más peligrosos (en España están autorizados más de 300 insecticidas en cuya ficha de registro indica que son peligrosos, incluso algunos muy peligrosos, para las abejas). Por último, se debe apostar decididamente por la agricultura ecológica, la única solución de futuro”.
En estos momentos, nos explican, “estamos a la espera de que nos convoquen a esa reunión urgente que hemos solicitado a la consellera de Agricultura Elena Cebrián Calvo” y esperan, concluyen, que “antes de que sea demasiado tarde, se pongan soluciones a este grave problema que está envenenando nuestras abejas y al resto de los polinizadores”.