El 35% de la alimentación humana depende de la presencia de abejas en los campos; y el 80% de las plantas precisan ser polinizadas para dar frutos, semillas y reproducirse, procesos en los que también están directamente implicadas las abejas, según señala Xesús Asorey, dirigente de la Asociación Galega de Apicultura, en un trabajo en el que reclama una normativa diferente para autorizar el uso de fitosanitarios en la agricultura.
Asorey insiste en relacionar la desaparición de abejas en Galicia, un problema que se acentúa desde hace diez años, con el uso de estos productos agrotóxicos, e insiste en que defender las abejas supone defender la salud humana y el medio ambiente.