sábado, 19 de julio de 2008

Benicarló estudia los beneficios de la polinización en productos hortícolas y plantas aromáticas


Más del 80% de las especies vegetales del planeta y un 84% de la producción europea dependen de esta práctica
La cooperativa de Benicarló Benihort participa junto a la cooperativa de Llutxent, la Unión Protectora de El Perelló y la Unión de Mareny de Barraquetes en un estudio sobre la influencia y cuantificación de la polinización por insectos en productos de tipo hortícola y en plantas aromáticas.

En Benicarló hay ya colmenas distribuidas en algunas fincas agrícolas dedicadas a la producción de melones. La propuesta de la realización del estudio nació una vez detectada la baja fertilización por medio de abejas y relacionada como posible causante del descenso de producción que se estuvo sufriendo en algunos años anteriores.

El sindicato agrario de La Unió de Llauradors i Ramaders ha brindado su asesoramiento al proyecto para optimizar la polinización de los cultivos y las colmenas. Las cooperativas participan de la experiencia aportando sus técnicos propios, que están en contacto con el sector apícola.

En años anteriores detectaron que varios cultivos como el melón, el calabacín, la berenjena y el tomate fueron los más afectados por la baja fecundación por abejas u otros insectos.

Caso especial merecen los cítricos, en los que está demostrado el más que evidente beneficio de este tipo de fertilización en el aumento de producción.

Un trabajo publicado por La Unió estima en 600 millones de euros anuales las pérdidas por la falta de polinización. Entre las causas que tienden a aumentar esta carencia de polen provocada por la disminución de insectos polinizadores se pueden encontrar los problemas sanitarios, la destrucción de hábitats propios de las abejas y la contaminación ambiental entre otros factores.

A pesar de los beneficios de esta practican de los cítricos, La Unió de Llauradors i Ramaders considera "irracionales" los decretos para limitar la polinización cruzada en plantaciones de este tipo de árboles, ya que ha condenado a muerte a los insectos polinizadores. Así, el técnico del sindicato agrario, Enrique Simó, recuerda que "las abejas existen en la tierra desde hace más de 60 millones de años y que el homo sapiens, que lleva 250.000 años en el planeta, no puede sobrevivir sin las abejas".

Estos datos ofrecidos se corroboran en el hecho que más del 80% de las especies vegetales del planeta y la producción del 84% de las especies cultivadas en Europa depende directamente de la polinización entomófila. Concretamente, esta fertilización consiste en el traslado que hace el insecto del polen hasta los estigmas de la flor, logrando una correcta fecundación y formación de los frutos.

Además de la miel, la jalea y el polen, las abejas aportan otro tesoro, como es la polinización y la salud de nuestro planeta.