México, 16 jul (PL) México reactivará la producción apícola en la isla María Grande como el parte del programa nacional para el control de la abeja africana, informó el Ministerio de Agricultura.
Técnicos de ese proyecto se harán cargo de recuperar las colmenas existentes en la isla, ubicada en el Pacífico a 112 kilómetros de las costas del estado de Nayarit, lo que requerirá una inversión por más de un millón 370 mil 900 pesos (aproximadamente 107 mil dólares), indicó el anuncio gubernamental.
Reclusos del complejo penitenciario de la isla serán capacitados para asumir el trabajo en los criaderos, acordaron las secretarías de Agricultura y Seguridad Pública.
El objetivo es producir material genético de origen europeo y distribuirlo a los criadores comerciales de abejas reina que abastecen a los apicultores del país, lo cual contribuirá al control del proceso de "africanización en los apiarios", señaló la evaluación institucional.
Un propósito específico será tratar de reproducir el material biológico apícola resultante de una selección natural de nueve años para su distribución entre criadores de abeja reina y productores de miel en el resto del territorio nacional, detalló la secretaría de Agricultura.
Como meta, el proyecto prevé llegar a diciembre próximo con 512 colmenas en el archipiélago de las Islas Marías, en aras de suministrar pies de cría a los apicultores, siguiendo los criterios de alta producción de miel y sanidad de las abejas.
Según estimados de la Agricultura, a principios de 2011 podrá llegarse en la isla a una producción de dos mil abejas reinas fecundadas con vistas a su distribución como pies de cría.
María Madre, la mayor de las cuatro islas que integra el archipiélago de Islas Marías, fue elegida para este empeño, pues se encuentra aislada geográficamente, lo que impide la invasión de abejas africanas a las demás colmenas y preserva el material genético empleado.
De acuerdo con las autoridades mexicanas, la Colonia Penal Federal que radica allí está considerada como de baja seguridad y en ella pueden habitar hasta 13 mil internos, con sus familias, quienes trabajan y se rehabilitan en granjas agrícolas, ganaderas y de pesca.