Eusko Label comercializa unos 70.000 kilogramos de miel cada año, mayoritariamente de Gipuzkoa
La producción de miel incluida en el programa Eusko Label no se está viendo afectada por la mortandad de abejas que se viene produciendo en otras comunidades autónomas en los últimos años.
Según han informado a Europa Press desde Giez Berri, planta situada en Getaria (Gipuzkoa) y que es la única homologada en Euskadi para extraer y envasar miel de Eusko Label, la ligera bajada de producción que está registrando en este año se debe a cuestiones climatológicas, pero no a un descenso en la población de las colmenas por enfermedades, insecticidas o contaminación.
La citada planta de Giez Berri se encarga de procesar y envasar los alrededor de 70.000 kilogramos de miel que se comercializan bajo el sello Eusko Label cada año, de los que más de 40.000 proceden de Gipuzkoa, unos 20.000 de apicultores vizcaínos y el resto de Alava.
"Para nosotros, el mayor perjuicio que tenemos este año en la producción viene derivado del clima: en ciertos meses, junio por ejemplo, cuando empiezan a fortalecerse las colmenas para empezar a producir, hubo dos o tres semanas de lluvia", han explicado.
En este sentido, han rechazado que haya disminuido el nivel de población de abejas o que se hayan encontrado con colmenares muertos por culpa de la varroa (enfermedad producida por el ataque de un ácaro) o por culpa del uso de insecticidas en los campos.
Respecto a la cosecha de este año, han reconocido que en la primera recolección, la que se realiza con colmenas trashumantes en el sur de Navarra, "sí ha habido una pequeña bajada" para esta miel que se obtiene de las primeras flores (romero, tomillo o espliego).
Sobre esta bajada, han remarcado que "el problema ha sido más bien por el clima, porque ha llovido a destiempo y no ha hecho el sol que tenía que hacer, quizá justo en el momento en que estaban las abejas ya aumentando su número", operación en la que incluso pueden llegar casi a triplicar la población de invierno.
Las colmenas deben producir un excedente de miel que es el finalmente recolectado y, cuando no se dan los suficientes días de sol, las abejas acaban consumiendo dicho excedente. "Basta con que pasen tres o cuatro días seguidos lloviendo para que las abejas dejen de producir ese superavit que nosotros necesitamos para recolectar. Se comen lo que están almacenando", han remarcado.
Posteriormente, respecto a la recolección en otras zonas, desde Giez Berri se ha indicado que el volumen de miel está sufriendo "más bien altibajos" también por la misma causa del clima, ya que la entrada de verano no ha sido "muy adecuada" para el sector. CONTAMINACION
Sobre los problemas de contaminación o de enfermedades de las abejas, han indicado que son cuestiones que afectan especialmente a lugares en los que se desarrollan cultivos extensivos, más comunes en el sur de la península o en la zona mediterránea, pero poco frecuentes en el conjunto de la cornisa cantábrica.
El reglamento para la producción de miel de Eusko Label establece que procederá de colmenas censadas y ubicadas en la Comunidad Autónoma Vasca, estableciéndose los límites fuera de Euskadi para la época de producción y aprobándose algunas zonas de trashumancia, así como sus periodos, en, por ejemplo, Navarra o Burgos. Pese a todo, los productores de miel de Eusko Label deberán permanecer con todas sus colmenas a la vez en el País Vasco al menos tres meses al año.
Además, solamente podrán optar al distintivo Eusko Label aquellas mieles producidas en colmenas que no hayan sido sometidas a ningún tipo de tratamiento químico durante el período de mielada o producción, a la vez que la extracción deberá realizarse por centrifugación, nunca por prensado, ni se permitirá la aplicación de procesos de pasteurización.
El reglamento también establece que el proceso de filtración de la miel deberá permitir el paso del polen y la temperatura nunca deberá ser superior a 40°C.