Luis Garnelo, directivo de la asociación Fomento Forestal, que agrupa a productores de madera, principalmente de eucalipto, en el municipio de Monfero, es también un afamado apicultor. Acaba de ser galardonado con el cuarto premio en el certamen de Producto Galego de Calidade, en la modalidad de miel. Cuenta con 70 colmenas distribuidas en montes de Monfero e Igrexafeita. Se considera también un silvicultor del eucalipto.
-¿Tiene relación la calidad de la miel con la silvicultura?
-Claro. Incluso, para la certificación forestal del bosque, se tiene en cuenta si los árboles se utilizan también para la producción de miel. Una cosa y otra están muy relacionadas. Porque la miel sale del polen y las abejas van mucho a la flor del eucalipto.
-Y la zona geográfica, ¿también influye en la miel?
-Sí. Monfero, por ejemplo, tiene un medio ambiente muy bueno, sin contaminación, y por eso también la miel es mejor.
-¿Qué significa el premio?
-Creo que es un reconocimiento. Yo comercializo con la marca Miel de Monfero, a través de cooperativas como las de O Val y Serantes. A Queiroga, que es una cooperativa de apicultores, y yo como productor individual, somos los únicos que comercializamos con etiqueta propia en la comarca de Ferrol. Tanto de mi marca, y creo que también A Queiroga, vendemos toda la producción cada año.
-Existe la creencia de que las colmenas se cuidan solas, que requieren poco trabajo...
-Antes podía ser así, pero ahora no. La apicultura requiere mucho cuidado si no quieres que la barroa, un parásito de las abejas, se acabe con todo. Pero cuidando las colmenas se combate. Lo mismo que los montes, si los cuidas producen más madera. Es que al monte se le puede sacar mucho rendimiento.
Luis garnelo apicultor y productor forestal
