domingo, 24 de junio de 2007
El esplendor de la miel jerezana llega a Japón
Las instalaciones del Rancho Cortesano han acogido el rodaje de un reportaje para la cadena TV Tokyo
TEXTO: BLANCA ROMÁN / FOTOS: TAMARA SÁNCHEZ / JEREZ
El esplendor de la miel jerezana llega a Japón
ABEJAS. Las protagonistas del reportaje.
DATOS DEL RANCHO
Nombre: Rancho Cortesano. Museo de la Miel y las Abejas.
Ubicación: Carretera Cortes-Cuartillos, kilómetro 2.
Página web: www.ranchocortesano.net o www.museodelamielranchocortesano.com.
Teléfono: 956 237 528 / 635 514 786.
Distancia de Jerez: A 15 minutos de la ciudad, lo que se traduce en 13 kilómetros.
Precio de la entrada en el museo: es gratuita.
Instalaciones: Posee aparcamientos, parque infantil, colmenas, tienda/cafetería, sala de proyecciones, museo...
Japón es uno de esos países que siempre se relaciona con el exotismo y la tradición. Para el turista occidental es una nueva forma de ver la realidad a través de símbolos que parecen ilegibles y costumbres notablemente señaladas por el peso de su apasionante historia. En una tierra atractiva que, con el paso de los años, ha conseguido hermanarse en más de una ocasión con Jerez gracias a la creciente devoción de sus ciudadanos por el flamenco y el vino que nace en esta comarca.
Muchos son los extranjeros procedentes de esta lejana tierra asiática los que cada temporada vistan la ciudad y que ahora, gracias a un reportaje que tiene previsto emitir la televisión japonesa TV Tokyo, conocerán un nuevo espacio jerezano al que acudir: el Rancho Cortesano.
Y es que, desde hace dos días, un equipo de esta cadena nipona se ha instalado en el palacio de la miel jerezana para conocer el trabajo que a diario se desarrolla en él. De la mano de la productora Nexus, han desembarcado en Jerez tras meses de preparación, ya que «la primera vez que se pusieron en contacto con nosotros fue el pasado mes de abril a través de un correo electrónico. En él nos contaron su intención de grabar un reportaje en nuestro museo para su programa de televisión, un espacio que se emite de forma semanal y que trata de la apicultura en el mundo», como explica José Manuel, responsable del Rancho.
Bee Museum es el nombre del programa que se centra en cómo se desarrolla la floración y recolección de la miel en distintas zonas de los cinco continentes y para el que trabajan los cinco integrantes del equipo técnico que ayer deambulaba por las instalaciones del Rancho Cortesano tras los escolares que fueron de excursión al museo. «Han estado en Santiago de Compostela y mañana (por hoy) se marchan a Valencia para continuar con su reportaje en España. Aquí, están siguiendo paso a paso el trabajo que llevamos a cabo con los niños. Cómo les explicamos qué es la Apicultura, el recorrido que hacemos por el museo, la visita a las colmenas... no pierden detalle», señala José Manuel mientras que indica al grupo que se coloque bien el traje para poder acceder a la zona donde están las abejas.
De esta forma, el trabajo audiovisual de estos peculiares visitantes se centra en tomas que comienzan con las explicaciones que los responsables del Rancho les hacen llegar a los pequeños sobre la Apicultura, los productos de las colmenas y cómo viven las abejas. Tras ésta primera parte se recogerá un amplio recorrido por la historia de estos animales, sin olvidar las proyecciones que suelen acompañar a toda vista. Asimismo, uno de los momentos más intensos del reportaje se centrará en el instante en el que los niños entrarán en contacto directo con los enjambres. Debidamente vestidos para la ocasión y con cierto recelo los pequeños se dirigen hasta las colmenas con los trabajadores del Rancho, un lugar donde aprenden a dejar de temer a un animal que gracias a su labor genera miel, polen, jalea real o cera.
Mientras tanto, y sin hablar a penas español, el equipo de TV Tokyo en los tiempos muertos juega con los niños. A través de muecas y sonrisas las tomas se hacen más llevaderas. «Han hecho este tipo de trabajos en Perú, Cuba, Estados Unidos... y ahora han decidido venir a España. Para los japoneses las abejas son muy importantes», subraya el responsable del Rancho tras hablar con Tamako, traductor y chófer del grupo asiático.
«Para nosotros que una cadena japonesa venga a grabar un reportaje aquí no es más que un hecho anecdótico porque no creemos que por ésto vaya a venir más gente a nuestras instalaciones. No obstante, nos parece algo muy positivo», comentan desde el Museo de la Miel y las Abejas, que está ubicado en la carretera que une la barriada rural de Cuartillos con la pedanía de San Isidro del Guadalete.
Los técnicos de la productora Nexus continúan con su trabajo: una cámara por aquí, el cableado por allá, un pequeños receso para contemplar la naturaleza... y las padres e hijos que se encuentran de excursión en el Rancho Cortesano se relajan tras haber vivido una intensa jornada llena de nuevas sensaciones.
braguilar@lavozdigital.es
COAG Andalucía llega un acuerdo con medio ambiente para permitir el trabajo de los apicultores en los montes
Esta organización agraria fue la primera en señalar la imposibilidad de cumplir la actual normativa y muestra su satisfacción ante el acuerdo alcanzado con la Consejería para modificarla.
Sevilla, 14 de junio de 2007. La Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos, COAG Andalucía, ha llegado a un acuerdo con la Consejería de Medio Ambiente para que los apicultores puedan hacer su trabajo en terrenos forestales, durante el periodo de restricciones por el máximo riesgo de incendios forestales (este año, del 1 de junio al 15 de octubre). Tras la reunión mantenida con el director general de Gestión del Medio Natural, José Guirado, esta organización agraria ha conseguido el compromiso de modificación de la orden que regulaba el uso del ahumador en zonas forestales, una normativa que, como señaló en su momento COAG Andalucía, imposibilitaba el trabajo de los profesionales de la apicultura.
El acuerdo autoriza a los apicultores a desarrollar su actividad sin tener que comunicarlo con un mes de antelación, un requisito de la normativa que era, a todas luces, imposible de realizar. A cambio, los profesionales de la apicultura deberán cumplir una serie de compromisos, como el de suscribir un seguro de responsabilidad civil, disponer de un extintor o mochila de agua, encender y apagar el ahumador en un bidón habilitado para esta tarea, y mantener los colmenares libres de pasto.
COAG Andalucía considera que estos compromisos son asumibles para los apicultores y que, gracias a este acuerdo, fruto del diálogo, se puede hacer perfectamente compatible el desarrollo de la actividad apícola y la imprescindible prevención de los incendios forestales, un compromiso en el que los apicultores son los primeros interesados, puesto que viven del aprovechamiento de la vegetación natural con sus colmenas. Igualmente, hay que recordar que la apicultura cumple un papel fundamental en la conservación del medio ambiente, ya que, a menudo, son los apicultores los que, al ir a trabajar a los colmenares, ayudan a mantener en buen estado los caminos rurales.
Sevilla, 14 de junio de 2007. La Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos, COAG Andalucía, ha llegado a un acuerdo con la Consejería de Medio Ambiente para que los apicultores puedan hacer su trabajo en terrenos forestales, durante el periodo de restricciones por el máximo riesgo de incendios forestales (este año, del 1 de junio al 15 de octubre). Tras la reunión mantenida con el director general de Gestión del Medio Natural, José Guirado, esta organización agraria ha conseguido el compromiso de modificación de la orden que regulaba el uso del ahumador en zonas forestales, una normativa que, como señaló en su momento COAG Andalucía, imposibilitaba el trabajo de los profesionales de la apicultura.
El acuerdo autoriza a los apicultores a desarrollar su actividad sin tener que comunicarlo con un mes de antelación, un requisito de la normativa que era, a todas luces, imposible de realizar. A cambio, los profesionales de la apicultura deberán cumplir una serie de compromisos, como el de suscribir un seguro de responsabilidad civil, disponer de un extintor o mochila de agua, encender y apagar el ahumador en un bidón habilitado para esta tarea, y mantener los colmenares libres de pasto.
COAG Andalucía considera que estos compromisos son asumibles para los apicultores y que, gracias a este acuerdo, fruto del diálogo, se puede hacer perfectamente compatible el desarrollo de la actividad apícola y la imprescindible prevención de los incendios forestales, un compromiso en el que los apicultores son los primeros interesados, puesto que viven del aprovechamiento de la vegetación natural con sus colmenas. Igualmente, hay que recordar que la apicultura cumple un papel fundamental en la conservación del medio ambiente, ya que, a menudo, son los apicultores los que, al ir a trabajar a los colmenares, ayudan a mantener en buen estado los caminos rurales.
Unas abejas muy ecologistas
14/06/2007
Nacional | Apoidea es una empresa de base tecnológica que emplea las abejas como bioindicadores ambientales. Estos animales pueden ofrecer información sobre los niveles de contaminación del aire provocada por metales pesados, pesticidas, radiactividad y otros elementos.
El promotor de la firma, José Antonio Ruiz, es doctor en veterinaria y máster en Medio Ambiente. Su proyecto ha recibido la ayuda del Centro de Apoyo al Desarrollo Empresarial, de la Consejería de Innovación, Ciencia y Empresa; y el consejo científico del experto italiano Claudio Porrini.
La empresa cordobesa Apoidea ha iniciado el desarrollo del primer sistema de bioindicación ambiental con abejas de una ciudad española. El Ayuntamiento de la ciudad califal ha llegado a un acuerdo con esta firma para que instale cuatro estaciones de monitoreo que se ubicarán en las zonas con más polución de la ciudad. El objetivo: estudiar los niveles de contaminación ambiental a través de unos animales que, según el promotor de Apoidea, José Antonio Ruiz, ‘ofrecen la posibilidad de hacer estudios sistematizables y fácilmente reproducibles’ sobre los efectos de la contaminación en un organismo vivo.
Una vez obtenidos y procesados los datos, se elaborará un mapa geográfico con la información que puede ser útil para diversas áreas como el turismo, la certificación de calidad ambiental, la planificación del territorio o la agricultura ecológica.
Las abejas pueden ofrecer información sobre la concentración de metales pesados, la radiactividad o los pesticidas. De este modo, José Antonio Ruiz destacó que los pelos que recubren el cuerpo de este animal permiten que se le adhiera mucha contaminación; por su capacidad de vuelo, se espera que las estaciones de monitoreo cubran un área de siete kilómetros cuadrados; y pueden facilitar un estudio integral del territorio que contemple el suelo, el agua y las plantas.
Los parámetros físico-químicos empleados en la actualidad sirven como indicadores de la contaminación, pero no expresan cómo repercuten en los seres vivos. Además, José Antonio Ruiz señaló que la instalación de una estación de indicadores físico-químicos, de las que existen dos en Córdoba, cuesta unos ciento veinte mil euros, mientras que el proyecto de Apoidea, que contempla cuatro estaciones, no supera los cuarenta mil euros y cubrirá veintiocho kilómetros cuadrados en total.
No obstante, el investigador subrayó que las dos medidas se complementan y son necesarias. De hecho, el proyecto de Ley de Calidad de Aire y Protección de la Atmósfera, aprobado el pasado mes de enero, exige a los municipios con más de doscientos cincuenta mil habitantes disponer de redes de evaluación, informar a la población sobre los niveles de contaminación y elaborar programas para cumplir los objetivos de calidad del aire. Apoidea ha nacido bajo la tutela del Centro de Apoyo al Desarrollo Empresarial (CADE) de la Consejería de Innovación, Ciencia y Empresa. De este modo, la empresa se encuentra en la actualidad en una fase de pre-incubadora, según destacó el director del CADE, Miguel Luque, y abandonará el centro en unos tres meses.
Una vez que esté preparada y salga del centro, el CADE continuará acompañando a Apoidea y prestándole servicios hasta que se estabilice totalmente.
Nacional | Apoidea es una empresa de base tecnológica que emplea las abejas como bioindicadores ambientales. Estos animales pueden ofrecer información sobre los niveles de contaminación del aire provocada por metales pesados, pesticidas, radiactividad y otros elementos.
El promotor de la firma, José Antonio Ruiz, es doctor en veterinaria y máster en Medio Ambiente. Su proyecto ha recibido la ayuda del Centro de Apoyo al Desarrollo Empresarial, de la Consejería de Innovación, Ciencia y Empresa; y el consejo científico del experto italiano Claudio Porrini.
La empresa cordobesa Apoidea ha iniciado el desarrollo del primer sistema de bioindicación ambiental con abejas de una ciudad española. El Ayuntamiento de la ciudad califal ha llegado a un acuerdo con esta firma para que instale cuatro estaciones de monitoreo que se ubicarán en las zonas con más polución de la ciudad. El objetivo: estudiar los niveles de contaminación ambiental a través de unos animales que, según el promotor de Apoidea, José Antonio Ruiz, ‘ofrecen la posibilidad de hacer estudios sistematizables y fácilmente reproducibles’ sobre los efectos de la contaminación en un organismo vivo.
Una vez obtenidos y procesados los datos, se elaborará un mapa geográfico con la información que puede ser útil para diversas áreas como el turismo, la certificación de calidad ambiental, la planificación del territorio o la agricultura ecológica.
Las abejas pueden ofrecer información sobre la concentración de metales pesados, la radiactividad o los pesticidas. De este modo, José Antonio Ruiz destacó que los pelos que recubren el cuerpo de este animal permiten que se le adhiera mucha contaminación; por su capacidad de vuelo, se espera que las estaciones de monitoreo cubran un área de siete kilómetros cuadrados; y pueden facilitar un estudio integral del territorio que contemple el suelo, el agua y las plantas.
Los parámetros físico-químicos empleados en la actualidad sirven como indicadores de la contaminación, pero no expresan cómo repercuten en los seres vivos. Además, José Antonio Ruiz señaló que la instalación de una estación de indicadores físico-químicos, de las que existen dos en Córdoba, cuesta unos ciento veinte mil euros, mientras que el proyecto de Apoidea, que contempla cuatro estaciones, no supera los cuarenta mil euros y cubrirá veintiocho kilómetros cuadrados en total.
No obstante, el investigador subrayó que las dos medidas se complementan y son necesarias. De hecho, el proyecto de Ley de Calidad de Aire y Protección de la Atmósfera, aprobado el pasado mes de enero, exige a los municipios con más de doscientos cincuenta mil habitantes disponer de redes de evaluación, informar a la población sobre los niveles de contaminación y elaborar programas para cumplir los objetivos de calidad del aire. Apoidea ha nacido bajo la tutela del Centro de Apoyo al Desarrollo Empresarial (CADE) de la Consejería de Innovación, Ciencia y Empresa. De este modo, la empresa se encuentra en la actualidad en una fase de pre-incubadora, según destacó el director del CADE, Miguel Luque, y abandonará el centro en unos tres meses.
Una vez que esté preparada y salga del centro, el CADE continuará acompañando a Apoidea y prestándole servicios hasta que se estabilice totalmente.
Un parásito asiático, principal causa de la mortalidad de las abejas
Los apicultores andaluces se enfrentan a uno de los momentos más preocupantes del sector en los últimos años por el despoblamiento de las colmenas. Una situación que se está produciendo desde hace unos meses y que trae de cabeza a los expertos, ya que no encuentran ninguna explicación. Al parecer, se ha podido perder entre un 20 y un 30 por ciento de las colonias andaluzas. Para analizar la causa real de esta elevada mortalidad recientemente se han celebrado unas jornadas apícolas en Vélez-Málaga.
Según el veterinario de la Unión de Pequeños Agricultores (UPA), Miguel Ángel Bolancé, el despoblamiento es un síndrome, puesto que son varias causas las que lo provocan. Entre los principales problemas apunta a un parásito de origen asiático que se está introduciendo en el país ('Nosema Ceranae'). 'Perfora el intestino del animal, por lo que puede morir durante el vuelo de forma que el apicultor no lo detecta', explica Bolancé. Al parecer, este parásito se puede haber introducido a través de los intercambios de enjambres y abejas reina que se están llevando a cabo con países extranjeros.
El cambio climático es otra de las posibles causas señaladas por el veterinario del sindicato UPA. 'Estamos teniendo inviernos demasiado cálidos y veranos fríos, lo que despista el ciclo biológico de la colmena', señala.
El elevado uso de fitosanitarios por parte de los agricultores también puede estar afectando negativamente a las abejas, ya que cada vez son más fuertes y se mantienen más en las plantas. Además, el cambio en los tipos de semillas, transgénicas y de ciclos cortos, provoca que se genere menos cantidad de néctar, lo que se une al menor tamaño de las flores, dificultando la recolección a estos animales.
Este retroceso de la población apícola hace temer a los apicultores que se produzca un importante descenso en la producción de miel en las próximas campañas. En este sentido, el secretario provincial de la UPA, José Gámez, ha exigido un aumento de las ayudas de las administraciones al sector. 'Las abejas cumplen una función muy importante en las cosechas de los agricultores', declara.
Además, Gámez solicita un mayor control sobre la comercialización de mieles de otros países como China, 'de peor calidad, pero más baratas'.
La mortandad de las abejas ha despoblado ya una tercera parte de las colmenas ourensanas
domingo, 17 de junio de 2007
Aunque se ha extendido la creencia de que el ’síndrome de despoblamiento de las colmenas’ se debe a la acción tóxica de los pesticidas, las investigaciones son contradictorias al respecto, según se puso de manifiesto en unas jornadas ayer en Barbadás. También se detecta un aumento de enfermedades y la afectación en años con malas condiciones climáticas. Este síndrome no es nuevo pero está incidiendo más en los últimos tres años, en los que provocó la desaparición del 30% de las colmenas gallegas.
Si bien no es un fenómeno nuevo, el ’síndrome de despoblamiento de las colmenas’ se está manifestando en los últimos tres años con especial virulencia y ha causado la desaparición de un 30% de la población de abejas. Así, los apicultores detectan que disminuye el número de abejas sin causa aparente (no se encuentran los ejemplares fallecidos, porque se mueren en el campo, no en la colmena) y que las que sobreviven no pueden realizar las tareas habituales en la colonia. Esto impide que las abejas cumplan su importante función polinizadora, para la reproducción de las plantas.
Las investigaciones no han detectado una única causa sobre esta mortandad y son varias las teorías que se están estudiando, que ayer se presentaron en una jornada de la Agrupación de Apicultores en el Centro Empresarial Transfronterizo de Barbadás.
Una de las causas más esgrimidas comúnmente es la acción tóxica de determinados pesticidas agrícolas. Sin embargo, ’os estudios son contradictorios e non concluintes’, según manifestó Ester Ordóñez, veterinaria de la Agrupación. En Francia llevan varios años estudiando este factor y no se ha podido demostrar la relación, y la mortandad sigue siendo elevada años después de prohibir os pesticidas. Además, en Galicia se ha comprobado que existe mortandad tanto en colmenares situados cerca de huertas, frutales y campos de maíz como en zonas de montaña donde no se aplican esos tratamientos. En todo caso, no se descartan intoxicaciones puntuales. Sin embargo, Ester Ordoñez advierte que ’non hai que provocar alarmas infundadas que poidan danar ó apicultor e ó consumidor’ al atribuir la mortandad sólo a esta causa, y añadió que ’a maioría do mel galego procede de especies silvestres que non se tratan.
Enfermedades
Entre otros factores que se barajan están el aumento de la incidencia de enfermedades comunes, que en Galicia son la ’varroa’ (parásito) y ’loque’ (enfermedad bacteriana), ésta última bastante frecuente en Ourense. Si no se realizan los tratamientos adecuados o se manejan incorrectamente las colmenas (sin desinfectar el material) aumenta la mortandad. Asimismo, en 2005 se esta detectando presencia en España del parásito ’nosema’, que podría estar relacionado con el despoblamiento. En Galicia, se detectó en un 31% de los casos estudiados, pero en otras zonas (como Asturias o Andalucía) alcanza el 90%. En caso de enfermedad, es preciso definir bien cuál es y aplicar el tratamiento específico para cada caso.
También la climatología se baraja como un factor que influye en el ’síndrome de despoblamiento’. Un año con clima marcado por la falta de floración o de polen (como ocurrió en el verano de 2004, muy seco, que provocó que las colmenas no recibiesen polen fresco), provoca una mortandad en las colmenas, ya que disminuyen las energías y resistencia a las enfermedades de las abejas.
Aunque se ha extendido la creencia de que el ’síndrome de despoblamiento de las colmenas’ se debe a la acción tóxica de los pesticidas, las investigaciones son contradictorias al respecto, según se puso de manifiesto en unas jornadas ayer en Barbadás. También se detecta un aumento de enfermedades y la afectación en años con malas condiciones climáticas. Este síndrome no es nuevo pero está incidiendo más en los últimos tres años, en los que provocó la desaparición del 30% de las colmenas gallegas.
Si bien no es un fenómeno nuevo, el ’síndrome de despoblamiento de las colmenas’ se está manifestando en los últimos tres años con especial virulencia y ha causado la desaparición de un 30% de la población de abejas. Así, los apicultores detectan que disminuye el número de abejas sin causa aparente (no se encuentran los ejemplares fallecidos, porque se mueren en el campo, no en la colmena) y que las que sobreviven no pueden realizar las tareas habituales en la colonia. Esto impide que las abejas cumplan su importante función polinizadora, para la reproducción de las plantas.
Las investigaciones no han detectado una única causa sobre esta mortandad y son varias las teorías que se están estudiando, que ayer se presentaron en una jornada de la Agrupación de Apicultores en el Centro Empresarial Transfronterizo de Barbadás.
Una de las causas más esgrimidas comúnmente es la acción tóxica de determinados pesticidas agrícolas. Sin embargo, ’os estudios son contradictorios e non concluintes’, según manifestó Ester Ordóñez, veterinaria de la Agrupación. En Francia llevan varios años estudiando este factor y no se ha podido demostrar la relación, y la mortandad sigue siendo elevada años después de prohibir os pesticidas. Además, en Galicia se ha comprobado que existe mortandad tanto en colmenares situados cerca de huertas, frutales y campos de maíz como en zonas de montaña donde no se aplican esos tratamientos. En todo caso, no se descartan intoxicaciones puntuales. Sin embargo, Ester Ordoñez advierte que ’non hai que provocar alarmas infundadas que poidan danar ó apicultor e ó consumidor’ al atribuir la mortandad sólo a esta causa, y añadió que ’a maioría do mel galego procede de especies silvestres que non se tratan.
Enfermedades
Entre otros factores que se barajan están el aumento de la incidencia de enfermedades comunes, que en Galicia son la ’varroa’ (parásito) y ’loque’ (enfermedad bacteriana), ésta última bastante frecuente en Ourense. Si no se realizan los tratamientos adecuados o se manejan incorrectamente las colmenas (sin desinfectar el material) aumenta la mortandad. Asimismo, en 2005 se esta detectando presencia en España del parásito ’nosema’, que podría estar relacionado con el despoblamiento. En Galicia, se detectó en un 31% de los casos estudiados, pero en otras zonas (como Asturias o Andalucía) alcanza el 90%. En caso de enfermedad, es preciso definir bien cuál es y aplicar el tratamiento específico para cada caso.
También la climatología se baraja como un factor que influye en el ’síndrome de despoblamiento’. Un año con clima marcado por la falta de floración o de polen (como ocurrió en el verano de 2004, muy seco, que provocó que las colmenas no recibiesen polen fresco), provoca una mortandad en las colmenas, ya que disminuyen las energías y resistencia a las enfermedades de las abejas.
Nota de la Unió-COAG
La Unió denuncia que los controles de calidad para los productos apícolas de importación son insuficientes y ponen en peligro la seguridad alimentaria.
La Unió cree que puede haber motivos para un nuevo cierre de fronteras a las importaciones de China
20 de junio de 2007.- La Unió-COAG denuncia que los controles de calidad de los productos apícolas importados son totalmente insuficientes y ponen en evidente peligro la seguridad alimentaria de los consumidores. Según los datos facilitados hasta mayo de este año por la Red de Alertas Sanitarias de la Unión Europea ha habido un espectacular incremento en las detecciones de residuos de antibióticos en mieles importadas de China que intentaban entrar en el mercado europeo.
La Unió señala que los controles de calidad para los productos apícolas importados resultan insuficientes y que puede haber motivos suficientes para un nuevo cierre de fronteras a los envíos de productos apícolas procedentes de China. En enero de 2002 la Comisión Europea prohibía la entrada al mercado comunitario de mieles procedente de China al detectar determinadas partidas de residuos de antibióticos. Dos años más tarde, en 2004, la CE procedía al levantamiento del embargo al que La Unió se opuso porque no se daban las garantías adecuadas en materia de calidad y seguridad alimentaria en sus producciones. China, tras superar las prohibiciones, se ha vuelto a convertir de nuevo en el primer país productor mundial de miel con 260.000 toneladas al año y su principal mercado es la U.E. Sin embargo, no puede garantizar la seguridad alimentaria de los productos que exporta.
La producción de miel en España difícilmente supera las 30.000 toneladas al año. Sin embargo, las importaciones de miel han seguido en ascenso en los últimos años y en estos momentos se superan las 18.000 toneladas al año, de las cuales el 80% es de origen extracomunitario y provocan el derrumbe de los precios. Un gran porcentaje de las importaciones entra a precios de dumping (1,1-1,2 euros/kg), muy por debajo de los costes de producción de las explotaciones apícolas valencianas que se sitúan en 1,70 euros por kilogramo de miel producido. La caída de los precios sólo repercute en los productores valencianos y sin embargo el precio de la miel envasada al consumidor le cuesta cada vez más.
La Unió recuerda que el oficio milenario de la apicultura está en la cuerda floja en la Comunitat Valenciana, al límite de la rentabilidad, asfixiado por problemas sanitarios e inmerso en una grave crisis de precios. En estos momentos el síndrome de despoblamiento sigue afectando a millones de colmenas en todo el mundo, elevando la tasa de mortalidad hasta en un 50% y debilitando las colonias hasta alejarlas de su estado productivo óptimo. Los costes de producción han subido ininterrumpidamente mientras que los precios no se incrementan en proporción desde finales de los años 80.
Enrique Simó, técnico apícola de La Unió, dice que “hay que mantener un nivel elevado tanto en frecuencia como en número de controles en los puestos de inspección fronterizos para garantizar que los productos apícolas de terceros países con residuos no entren a la UE”.
Simó afirma que “no debemos olvidar tampoco que la importación de partidas de miel a bajo coste y de dudosa calidad genera una competencia desleal frente a nuestras producciones de calidad, ya que provocan una presión a la baja de los precios en el mercado interior. Pensamos que las importaciones deben cumplir los mismos requisitos que las nuestras que sí ofrecen totales garantías a los consumidores”.
Y si continua la tendencia al alza de las detecciones de residuos en sus mieles, la U.E debería plantearse de nuevo el cierre de las fronteras a las mieles Chinas.
La Unió cree que puede haber motivos para un nuevo cierre de fronteras a las importaciones de China
20 de junio de 2007.- La Unió-COAG denuncia que los controles de calidad de los productos apícolas importados son totalmente insuficientes y ponen en evidente peligro la seguridad alimentaria de los consumidores. Según los datos facilitados hasta mayo de este año por la Red de Alertas Sanitarias de la Unión Europea ha habido un espectacular incremento en las detecciones de residuos de antibióticos en mieles importadas de China que intentaban entrar en el mercado europeo.
La Unió señala que los controles de calidad para los productos apícolas importados resultan insuficientes y que puede haber motivos suficientes para un nuevo cierre de fronteras a los envíos de productos apícolas procedentes de China. En enero de 2002 la Comisión Europea prohibía la entrada al mercado comunitario de mieles procedente de China al detectar determinadas partidas de residuos de antibióticos. Dos años más tarde, en 2004, la CE procedía al levantamiento del embargo al que La Unió se opuso porque no se daban las garantías adecuadas en materia de calidad y seguridad alimentaria en sus producciones. China, tras superar las prohibiciones, se ha vuelto a convertir de nuevo en el primer país productor mundial de miel con 260.000 toneladas al año y su principal mercado es la U.E. Sin embargo, no puede garantizar la seguridad alimentaria de los productos que exporta.
La producción de miel en España difícilmente supera las 30.000 toneladas al año. Sin embargo, las importaciones de miel han seguido en ascenso en los últimos años y en estos momentos se superan las 18.000 toneladas al año, de las cuales el 80% es de origen extracomunitario y provocan el derrumbe de los precios. Un gran porcentaje de las importaciones entra a precios de dumping (1,1-1,2 euros/kg), muy por debajo de los costes de producción de las explotaciones apícolas valencianas que se sitúan en 1,70 euros por kilogramo de miel producido. La caída de los precios sólo repercute en los productores valencianos y sin embargo el precio de la miel envasada al consumidor le cuesta cada vez más.
La Unió recuerda que el oficio milenario de la apicultura está en la cuerda floja en la Comunitat Valenciana, al límite de la rentabilidad, asfixiado por problemas sanitarios e inmerso en una grave crisis de precios. En estos momentos el síndrome de despoblamiento sigue afectando a millones de colmenas en todo el mundo, elevando la tasa de mortalidad hasta en un 50% y debilitando las colonias hasta alejarlas de su estado productivo óptimo. Los costes de producción han subido ininterrumpidamente mientras que los precios no se incrementan en proporción desde finales de los años 80.
Enrique Simó, técnico apícola de La Unió, dice que “hay que mantener un nivel elevado tanto en frecuencia como en número de controles en los puestos de inspección fronterizos para garantizar que los productos apícolas de terceros países con residuos no entren a la UE”.
Simó afirma que “no debemos olvidar tampoco que la importación de partidas de miel a bajo coste y de dudosa calidad genera una competencia desleal frente a nuestras producciones de calidad, ya que provocan una presión a la baja de los precios en el mercado interior. Pensamos que las importaciones deben cumplir los mismos requisitos que las nuestras que sí ofrecen totales garantías a los consumidores”.
Y si continua la tendencia al alza de las detecciones de residuos en sus mieles, la U.E debería plantearse de nuevo el cierre de las fronteras a las mieles Chinas.
miércoles, 13 de junio de 2007
ZAMORA El 90% de la miel de la zona es de castaño, según los análisis
El laboratorio de la Denominación de Origen de Granada efectuó el estudio con una treintena de muestras de apicultores de la comarca Los resultados son satisfactorios para el colectivo de productores
A. SAAVEDRA/PUEBLA
El 90% de la miel de la zona es de castaño, según los análisis
Asistentes a la conferencia.
Marcas de calidad: Con Denominación de Origen declarada solo existen dos zonas, en la Alcarria y Granada, además de una Indicación Geográfica Protegida (IGP) solicitada para Galicia y que está pendiente de aprobar en Bruselas. Otra DO en estudio está en Extremadura. La tramitación para reconocer la miel de Granada se alargó dos años, pero la iniciativa tardó alrededor de dos décadas en madurar. En los últimos años, en esa zona se ha pasado de contar con dos envasadoras a 24 y el 60% de los doscientos apicultores son profesionales que viven del sector.
Los estudios encargados por la Asociación apicultores Libres de Sanabria y Carballeda demuestran que entre el 85 y el 90% de la miel que se produce en la zona es de castaño, que pasaría a engrosar las mieles de bosque de montaña.
El laboratorio Api Nevada-de Lanjarón (Granada) realizó estos estudios entre más de treinta muestras facilitadas por los apicultores de la asociación comarcal. El biólogo del laboratorio granadino, José Orantes, participó este fin de semana en el segundo ciclo de conferencias a los apicultores que promueven la Denominación de Origen para la producción de toda la provincia.
Orantes es secretario de la asociación de la DO Miel de Granada y secretario de la Federación de Asociaciones de Apicultores Independientes.
Los análisis determinan las buenas condiciones de la miel de la comarca, ya que no hay residuos de pesticidas agrícolas, ni de antibióticos prohibidos como el Fumidil, cuyo principio activo, la fumagilidina, es persistente. En otras comunidades, como Castilla La Mancha, se aplicó hace dos años para combatir el desabejamiento, algo que no sucedió en Sanabria.
Otro antibiótico usado para combatir la varroasis es Supona, ahora prohibido, cuyos residuos se depositan en la cera con consecuencias negativas: acorta la vida de las abejas y reduce la fertilidad de la reina.
La proporción de residuos de antibióticos-grupo de las tetraciclinas- permitidos detectada es mínima, uno por millón. Lo máximo permitido es de diez por millón. En la leche el porcentaje es de 250 por millón. Estos antibióticos se degradan en un periodo de dos meses, según precisó el presidente de Apicultores Libres, José Antonio González.
Una de las mejores
Para saber el origen de la miel se analiza el polen que lleva diluido. Es aquí «donde hubo sorpresa», explica González «porque el polen y el néctar de castaño es de entre el 91% y el 85% de la composición». Para los expertos, es una de las mejores mieles monoflorales.
Estas mieles tienen mayor valor en el mercado y hay que castralas en el momento justo de floración. Las abejas contribuyen así a otro factor importante que es la polinización de la abundante flor del castaño. Los niveles de acidez de esta miel son más altos, pero es una cualidad diferenciadora.
De la miel estudiada, solo hay cuatro muestras con concentraciones del 30 al 40 % de polen de brezo de colmenas en zona de sierra. El resto de las muestras presenta entre 1,5% y 5% de brezo. Tampoco hay tanta cantidad de roble como se pensaba, el 1%, y de piornos el 2%. Espino albar, zarzas y frutales integran del 0,5% al 1%. La floración temprana de frutales «las usan para alimentarse».
Procesos de calor como pasteurizar o calentar a 70 grados durante tres minutos degradan la calidad y propiedades de la miel, según los expertos, que recuerdan que la normativa que se aplica en Europa exige filtrar la miel de polen, partículas de cera. Este proceso es negativo porque no permite distinguir el origen y favorece prácticas engañosas con melazas y azúcares.
En el caso de la Denominación de Origen de la mil de Granadada, en los últimos años se ha pasado de contar con dos envasadoras a 24. El precio al que se paga es de 3,70 euros el kilo a granel al productor, y envasada de 5,70 el medio kilo.
En la actualidad, en esa zona hay más de doscientos apicultores, el 60% de los cuales son profesionales que viven exclusivamente de la miel.
sábado, 9 de junio de 2007
«La enfermedad de las abejas se combate con mucha vigilancia»
07/06/2007 | Deza-Tabeirós
APICULTOR DE CODESEDA
Sánchez C. |
MARCOS MÍGUEZ
Ramiro Abeijón García es un agricultor de Codeseda al que la pasión por las abejas, las colmenas y la apicultura le llegó de joven, aunque la tradición familiar tuvo mucho que ver. Ahora, es uno de los pocos estradenses que mantienen colmenas en el monte.
-¿Le dejaron en herencia las abejas, o fue vocación?
-Las tengo más bien por un capricho y porque me gustaban las colmenas desde pequeño, ya que la familia siempre las tuvo. Cuando volví de Suiza me procuré algunas, y... hasta hoy.
-¿Es fácil dedicarse a esto?
-Si tienes unos conocimientos básicos, no es muy difícil. Entendiendo un poco, sabes que tienes que ponerlas en sitios abrigados del viento del norte. Por otra parte, la inversión no es muy grande. Puedes empezar con dos colmenas, y a los pocos años acabas teniendo veinte, o más, como yo.
-Las abejas están de moda por una enfermedad que las diezma...
-Todo empezó hace pocos años. Yo creo que es una enfermedad de ellas, ya conocida y que tenía cura, pero que ha sufrido alguna alteración. Para evitar la mortandad, hay que trabajar mucho con las colmenas, vigilarlas y recurrir a productos arriesgados.
-¿Hay nuevas normas para la apicultura?
-Sí, hay normativas recientes que nos afectan, como las relativas a los montes. Las colmenas deben estar alejadas de los pueblos y también de los caminos.
domingo, 3 de junio de 2007
GUÍA DE ISORA La apertura de La Casa de la Miel en Chirche potenciará el sector apícola .
Diario de Avisos
Guía de Isora
Los apicultores de Guía de Isora y de la comarca suroeste verán mejorada su labor con la apertura de la Casa de la Miel, una instalación ubicada en Chirche con la que el Ayuntamiento de Guía de Isora pretende dar un impulso a esta actividad tradicional.
A dos meses de la finalización de las obras, que cuentan con un presupuesto que supera los 154.000 euros, la Casa de la Miel se complementará con la contigua Casa de Tía Francisca que será un espacio dedicado a museo y un punto de venta de productos naturales. El Ayuntamiento prevé que la Casa de Tía Francisca abra sus puertas después del verano.
La Casa de la Miel permitirá llevar a cabo servicios de extracción, análisis, envasado y etiquetado de mieles, pero además en ella también se impartirán cursos y se prestará asesoramiento especializado a los apicultores. Ofrecerá además visitas guiadas a las instalaciones y una zona para la degustación de las mieles.
La Casa de la Miel está cofinanciada entre el Ayuntamiento y el Organismo Autónomo de Parques Nacionales, tendrá una superficie de 100 metros cuadrados distribuidos en una planta baja, cuatro salas para maduración, extracción y envasado, y una planta alta, en la que se diferenciará una sala polivalente con una capacidad para unas 30 personas y un lugar para exposición y venta de mieles.
Guía de Isora
Los apicultores de Guía de Isora y de la comarca suroeste verán mejorada su labor con la apertura de la Casa de la Miel, una instalación ubicada en Chirche con la que el Ayuntamiento de Guía de Isora pretende dar un impulso a esta actividad tradicional.
A dos meses de la finalización de las obras, que cuentan con un presupuesto que supera los 154.000 euros, la Casa de la Miel se complementará con la contigua Casa de Tía Francisca que será un espacio dedicado a museo y un punto de venta de productos naturales. El Ayuntamiento prevé que la Casa de Tía Francisca abra sus puertas después del verano.
La Casa de la Miel permitirá llevar a cabo servicios de extracción, análisis, envasado y etiquetado de mieles, pero además en ella también se impartirán cursos y se prestará asesoramiento especializado a los apicultores. Ofrecerá además visitas guiadas a las instalaciones y una zona para la degustación de las mieles.
La Casa de la Miel está cofinanciada entre el Ayuntamiento y el Organismo Autónomo de Parques Nacionales, tendrá una superficie de 100 metros cuadrados distribuidos en una planta baja, cuatro salas para maduración, extracción y envasado, y una planta alta, en la que se diferenciará una sala polivalente con una capacidad para unas 30 personas y un lugar para exposición y venta de mieles.
COAG Andalucía acusa a Medio Ambiente de ilegalizar por norma a los apicultores andaluces COAG Andalucía
Esta organización agraria denuncia que la Consejería de Medio Ambiente no ha contado con el sector apícola antes de publicar una normativa sobre el uso del humo en colmenares situados en terrenos forestales que es, literalmente, imposible de cumplir.
31. Mayo ´07 - La Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos, COAG Andalucía, considera que la Orden publicada el martes en el BOJA, por la que se establecen las limitaciones de usos y actividades en terrenos forestales y zonas de influencia forestal es imposible de cumplir para los apicultores. Dicha Orden prohíbe el uso del humo en los colmenares a partir del próximo viernes, 1 de junio (quince días antes que el año pasado) y hasta el 15 de octubre.
Esta organización agraria denuncia que la normativa, que demuestra un profundo desconocimiento de nuestra apicultura, se ha publicado sin contar con los profesionales, que en todo momento han estado dispuestos a colaborar para encontrar una opción viable que permita compatibilizar la seguridad en materia de incendios con el desarrollo de la actividad apícola. Hay que recordar que los apicultores son los primeros interesados en una correcta prevención de los incendios forestales, puesto que viven del aprovechamiento de la vegetación natural con sus colmenas. Al mismo tiempo, hay que tener en cuenta que la apicultura cumple un papel fundamental en la conservación del medio ambiente, reconocido por la propia Consejería, ya que, a menudo, son los apicultores los que, al ir a trabajar a sus colmenares, ayudan a mantener en buen estado los caminos rurales.
Actualmente, las explotaciones apícolas se encuentran en un momento de máxima actividad, por lo que la Orden publicada supone un daño muy grave: para realizar las diversas tareas en las colmenas no se necesita fuego, pero sí es fundamental el humo, generado con un ahumador. Sin él, es imposible trabajar con las abejas.
COAG denuncia que la Orden convierte en ilegales a los apicultores andaluces, que no pueden cumplir los requisitos establecidos en ésta para conseguir los permisos para poder trabajar en sus colmenas. El texto obliga al apicultor a presentar, con un mes de antelación, una solicitud en la que indique cuándo visitará cada colmenar; todo ello, tras haber presentado en los Ayuntamientos correspondientes a la localización de sus colmenares los planes de autoprotección. Estos requisitos revelan un total desconocimiento y desinterés por la actividad apícola, por parte de la Consejería, ya que es imposible prever con tanta antelación las circunstancias, tanto del clima y de la vegetación como de las propias colonias de abejas.
Por eso, COAG reitera su disposición al diálogo para cambiar esta normativa y para encontrar una solución viable, que permita compatibilizar la imprescindible prevención de los incendios forestales con el normal desarrollo de nuestra apicultura, una actividad tradicional en nuestros montes, protegida e indispensable para la polinización de la vegetación natural. En ese sentido, esta organización agraria recuerda que continuará trabajando para que los sectores agroganaderos sigan siendo, como siempre lo fueron, un ejemplo de convivencia con el medio ambiente.
31. Mayo ´07 - La Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos, COAG Andalucía, considera que la Orden publicada el martes en el BOJA, por la que se establecen las limitaciones de usos y actividades en terrenos forestales y zonas de influencia forestal es imposible de cumplir para los apicultores. Dicha Orden prohíbe el uso del humo en los colmenares a partir del próximo viernes, 1 de junio (quince días antes que el año pasado) y hasta el 15 de octubre.
Esta organización agraria denuncia que la normativa, que demuestra un profundo desconocimiento de nuestra apicultura, se ha publicado sin contar con los profesionales, que en todo momento han estado dispuestos a colaborar para encontrar una opción viable que permita compatibilizar la seguridad en materia de incendios con el desarrollo de la actividad apícola. Hay que recordar que los apicultores son los primeros interesados en una correcta prevención de los incendios forestales, puesto que viven del aprovechamiento de la vegetación natural con sus colmenas. Al mismo tiempo, hay que tener en cuenta que la apicultura cumple un papel fundamental en la conservación del medio ambiente, reconocido por la propia Consejería, ya que, a menudo, son los apicultores los que, al ir a trabajar a sus colmenares, ayudan a mantener en buen estado los caminos rurales.
Actualmente, las explotaciones apícolas se encuentran en un momento de máxima actividad, por lo que la Orden publicada supone un daño muy grave: para realizar las diversas tareas en las colmenas no se necesita fuego, pero sí es fundamental el humo, generado con un ahumador. Sin él, es imposible trabajar con las abejas.
COAG denuncia que la Orden convierte en ilegales a los apicultores andaluces, que no pueden cumplir los requisitos establecidos en ésta para conseguir los permisos para poder trabajar en sus colmenas. El texto obliga al apicultor a presentar, con un mes de antelación, una solicitud en la que indique cuándo visitará cada colmenar; todo ello, tras haber presentado en los Ayuntamientos correspondientes a la localización de sus colmenares los planes de autoprotección. Estos requisitos revelan un total desconocimiento y desinterés por la actividad apícola, por parte de la Consejería, ya que es imposible prever con tanta antelación las circunstancias, tanto del clima y de la vegetación como de las propias colonias de abejas.
Por eso, COAG reitera su disposición al diálogo para cambiar esta normativa y para encontrar una solución viable, que permita compatibilizar la imprescindible prevención de los incendios forestales con el normal desarrollo de nuestra apicultura, una actividad tradicional en nuestros montes, protegida e indispensable para la polinización de la vegetación natural. En ese sentido, esta organización agraria recuerda que continuará trabajando para que los sectores agroganaderos sigan siendo, como siempre lo fueron, un ejemplo de convivencia con el medio ambiente.
La Unió-COAG denuncia la situación límite del sector apícola valenciano y reclama soluciones urgentes
31 de mayo de 2007.- La Unió denuncia la situación límite del sector apícola valenciano y reclama soluciones urgentes antes de que sea demasiado tarde y los problemas del déficit de polinización amenacen la salud de todo el planeta, pues lo anterior está provocando un abandono progresivo de la actividad y que los más jóvenes busquen otras alternativas fuera de la apicultura.
Paralelamente a esta situación, la Conselleria de Agricultura adeuda más de 12 millones de euros a los apicultores valencianos de las indemnizaciones de la “pinyolà” de años anteriores y todavía no se sabe nada acerca de las prometidas ayudas agroambientales.
La Unió recuerda que el oficio milenario de la apicultura esta en la cuerda floja en la Comunitat Valenciana, al límite de la rentabilidad, asfixiado por problemas sanitarios e inmerso en una grave crisis de precios. En estos momentos el síndrome de despoblamiento sigue afectando a millones de colmenas en todo el mundo, elevando la tasa de mortalidad hasta en un 50% y debilitando las colonias hasta alejarlas de su estado productivo óptimo. Los costes de producción han subido ininterrumpidamente mientras que los precios no se incrementan en proporción desde finales de los años 80. La importación de partidas de miel a bajo coste y de dudosa calidad supone una competencia desleal frente a nuestras producciones de calidad, ya que genera una presión a la baja en los precios del mercado interior, poniendo en peligro la rentabilidad de las explotaciones apícolas.
La Unió señala que la situación sanitaria y de mercado está afectando a las abejas y diezmando sus poblaciones y con ello los beneficios de la polinización. Resulta paradójico que mientras en muchas zonas luchan por tener suficientes colmenas para cubrir sus necesidades de polinización, en otras como la Comunitat no se les valora e incluso se les penaliza con legislación como la de la pinyolà.
Enrique Simó, técnico del sector apícola de La Unió, dice que “los insectos polinizadores son la base de la biodiversidad y bioindicadores de la salud de nuestro planeta. Las abejas existen en la tierra desde hace más de sesenta millones de años y pueden sobrevivir sin los humanos. Sin embargo, el homo sapiens, que apenas lleva 250.000 años en el planeta, no puede sobrevivir sin las abejas. Los problemas de la apicultura nos alertan que no somos tan “sapiens” como pensamos y que nos estamos equivocando al ir en contra de las leyes de la naturaleza”.
A juicio de Simó “las Administraciones todavía están a tiempo de ponerle remedio y darse cuenta que los productos apícolas pueden importarse de cualquier parte del mundo pero lo que no puede importarse es la polinización y es eso lo que hace que la apicultura sea imprescindible para nuestros ecosistemas naturales y agrarios. El déficit de polinización es la consecuencia más grave del síndrome de despoblamiento y la desaparición de las abejas afectan al equilibrio y la salud de todo el planeta”.
En este sentido, La Unió sigue a la espera de que la Conselleria de Agricultura concrete su propuesta de ayudas agroambientales dirigidas al sector para compensar los beneficios basados en la polinización y la protección de los recursos naturales, del mismo modo que ya poseen el resto de comunidades autónomas con cierta relevancia apícola. La Unió confía que la Generalitat garantice la viabilidad y puesta en marcha de los compromisos adquiridos al respecto en materia de ayudas agroambientales.
Paralelamente a esta situación, la Conselleria de Agricultura adeuda más de 12 millones de euros a los apicultores valencianos de las indemnizaciones de la “pinyolà” de años anteriores y todavía no se sabe nada acerca de las prometidas ayudas agroambientales.
La Unió recuerda que el oficio milenario de la apicultura esta en la cuerda floja en la Comunitat Valenciana, al límite de la rentabilidad, asfixiado por problemas sanitarios e inmerso en una grave crisis de precios. En estos momentos el síndrome de despoblamiento sigue afectando a millones de colmenas en todo el mundo, elevando la tasa de mortalidad hasta en un 50% y debilitando las colonias hasta alejarlas de su estado productivo óptimo. Los costes de producción han subido ininterrumpidamente mientras que los precios no se incrementan en proporción desde finales de los años 80. La importación de partidas de miel a bajo coste y de dudosa calidad supone una competencia desleal frente a nuestras producciones de calidad, ya que genera una presión a la baja en los precios del mercado interior, poniendo en peligro la rentabilidad de las explotaciones apícolas.
La Unió señala que la situación sanitaria y de mercado está afectando a las abejas y diezmando sus poblaciones y con ello los beneficios de la polinización. Resulta paradójico que mientras en muchas zonas luchan por tener suficientes colmenas para cubrir sus necesidades de polinización, en otras como la Comunitat no se les valora e incluso se les penaliza con legislación como la de la pinyolà.
Enrique Simó, técnico del sector apícola de La Unió, dice que “los insectos polinizadores son la base de la biodiversidad y bioindicadores de la salud de nuestro planeta. Las abejas existen en la tierra desde hace más de sesenta millones de años y pueden sobrevivir sin los humanos. Sin embargo, el homo sapiens, que apenas lleva 250.000 años en el planeta, no puede sobrevivir sin las abejas. Los problemas de la apicultura nos alertan que no somos tan “sapiens” como pensamos y que nos estamos equivocando al ir en contra de las leyes de la naturaleza”.
A juicio de Simó “las Administraciones todavía están a tiempo de ponerle remedio y darse cuenta que los productos apícolas pueden importarse de cualquier parte del mundo pero lo que no puede importarse es la polinización y es eso lo que hace que la apicultura sea imprescindible para nuestros ecosistemas naturales y agrarios. El déficit de polinización es la consecuencia más grave del síndrome de despoblamiento y la desaparición de las abejas afectan al equilibrio y la salud de todo el planeta”.
En este sentido, La Unió sigue a la espera de que la Conselleria de Agricultura concrete su propuesta de ayudas agroambientales dirigidas al sector para compensar los beneficios basados en la polinización y la protección de los recursos naturales, del mismo modo que ya poseen el resto de comunidades autónomas con cierta relevancia apícola. La Unió confía que la Generalitat garantice la viabilidad y puesta en marcha de los compromisos adquiridos al respecto en materia de ayudas agroambientales.
Proponen agrupar colmenas para un saneamiento apícola más efectivo
01/06/2007 | Lugo
En Asturias, pérdida de hábitat, pesticidas y enfermedades acabaron con la especie silvestre
Medio Rural abrió una línea de ayudas para la compra de enjambres y lucha contra enfermedades
Xavier Lombardero | redacción
LOMBARDERO
Directivos de las asociaciones de apicultores de Galicia y Lugo (AGA y APLA) trataron con la Consellería de Medio Rural un plan de agrupamiento de pequeños colmenares dispersos en lugares adecuados donde los apiarios puedan ser saneados frente a los ataques de varroa, loque y otras enfermedades. Para el delegado de Medio Rural en Lugo, Emilio López Pérez, el trabajo de los apicultores y asociaciones en el saneamiento debe estar al nivel de otros colectivos ganaderos.
La Xunta tras muestrear apiarios, seguirá investigando causas en el problema de la desaparición de abejas, de cara a la elaboración del plan apícola 2008-2010. Estableció una línea de ayudas de asistencia técnica y lucha contra la varroa para las asociaciones, y otra sobre trashumancia de colmenas y subvención a la compra de enjambres para apicultores particulares. Otros años hubo apicultores que criticaron la escasez de ayudas. El productor ecológico Manuel Macía, en Quiroga, dice que en 2004 recibió 18 euros de subvención para el saneamiento de 600 colmenas. Aún hoy le resulta más barato comprar directamente a fábrica en Cataluña el producto para la varroa.
El despoblamiento
Dentro del plan apícola estatal, tres de los proyectos de investigación se orientan claramente al despoblamiento de las colmenas. La Universidad de Córdoba evalúa los factores epidemiológicos, ambientales y nutricionales. El Centro Regional Apícola de Marchamalo, en Guadalajara, con el que colabora la Agrupación Apícola de Galicia, estudia el impacto de la nosemosis (Nosema ceranae) en el debilitamiento y mortalidad de las colmenas, mientras que la Universidad de Valladolid se ocupa de los agrotóxicos en productos apícolas.
Según Unións Agrarias, que colabora en estos proyectos, la Universidad de Zaragoza investiga la epidemiología y evaluación de los residuos en productos apícolas. El estudio de seis virus en las abejas ibéricas y la varroa es el campo de investigación del Consejo regulador de la denominación de origen Miel de Granada, mientras que la Universidad Complutense de Madrid estudia la virosis en las abejas melíferas. El Consejo de Investigaciones Científicas y la Universidad de Murcia desarrollan nuevos tratamientos para el control de las enfermedades de la abeja, basados en extractos vegetales. Se trata a su vez de determinar la presencia de acaricidas, antibióticos y metales pesados en productos apícolas y compuestos de origen vegetal. La Universidad de Córdoba atañe al control biológico de varroa mientras que la Politécnica de Valencia enfoca sus investigaciones a nuevos sistemas de esterilización de la cera.
Polinización en Asturias
Los apicultores burgaleses también han dado la voz de alerta sobre la alta mortandad de abejas. Critican que en España se vendan a precio de saldo pesticidas prohibidos en Francia. Y en Asturias el Fondo para la Protección de los Animales Salvajes (FAPAS) firmó un convenio con las asociaciones de apicultores para fomentar la polinización, de la que dependen la fructificación de muchas especies vegetales, y de fauna. Dicen que la abeja en estado silvestre está prácticamente extinguida, por el uso de pesticidas, pérdida de hábitat y enfermedades, mientras que la situación de la abeja doméstica Apis melífera, no es mucho mejor. Realizarán un mapa de polinización para conocer las zonas asturianas más deficitarias, para luego instalar colmenas en lugares próximos.
En Francia apenas desaparecen ya las abejas
El problema del despoblamiento de colmenas, en que los últimos años se ha manifestado de forma virulenta en España y otros países, remite en Francia pues en el último año -según expertos galos citados por la Asociación Galega de Apicultura (AGA)-, apenas hubo desaparición de abejas.
Especialistas franceses y belgas participarán el próximo día 23 en las jornadas de apicultura que organiza AGA. Al parecer, la cabaña apícola francesa se ha recuperado a niveles de hace 15 años, lo que se relaciona con la prohibición realizada en el 2004 de insecticidas como el fipronil e imidacloprid. Según Xesús Asorey, «estes neurotóxicos teñen unha vida media e logo xa non son eficaces. Aquí chegaron no millo forraxeiro, para tratar as horas e o eucaliptos, formando nubes tóxicas que viaxan polo vento centos de kilómetros, ata chocar con puntos dalgunhas montañas como Manzaneda ou O Courel».
No obstante, apicultores gallegos creen que hay que estar alerta sobre el uso de agrotóxicos de nueva generación mucho más letales. Asorey cita, por ejemplo uno cuyo principio activo es el thiamethoxam. En la propia ficha de seguridad del producto, el fabricante advierte: «Tóxico para los organismos acuáticos, puede provocar a largo plazo efectos negativos en el medio ambiente acuático. Muy peligroso para la abejas. Para protección de las abejas, no tratar en áreas ni épocas de actividad de las mismas».
Dice además que no debe utilizarse en suelos arenosos, ni aplicarlo más de dos campañas consecutivas sobre la misma parcela, ni llegar a las aguas por los sistemas de evacuación de las explotaciones o caminos.
Especialistas franceses y belgas participarán el próximo día 23 en las jornadas de apicultura que organiza AGA. Al parecer, la cabaña apícola francesa se ha recuperado a niveles de hace 15 años, lo que se relaciona con la prohibición realizada en el 2004 de insecticidas como el fipronil e imidacloprid. Según Xesús Asorey, «estes neurotóxicos teñen unha vida media e logo xa non son eficaces. Aquí chegaron no millo forraxeiro, para tratar as horas e o eucaliptos, formando nubes tóxicas que viaxan polo vento centos de kilómetros, ata chocar con puntos dalgunhas montañas como Manzaneda ou O Courel».
No obstante, apicultores gallegos creen que hay que estar alerta sobre el uso de agrotóxicos de nueva generación mucho más letales. Asorey cita, por ejemplo uno cuyo principio activo es el thiamethoxam. En la propia ficha de seguridad del producto, el fabricante advierte: «Tóxico para los organismos acuáticos, puede provocar a largo plazo efectos negativos en el medio ambiente acuático. Muy peligroso para la abejas. Para protección de las abejas, no tratar en áreas ni épocas de actividad de las mismas».
Dice además que no debe utilizarse en suelos arenosos, ni aplicarlo más de dos campañas consecutivas sobre la misma parcela, ni llegar a las aguas por los sistemas de evacuación de las explotaciones o caminos.
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